Sábado 18 de mayo - 18 horas. Una peatonal semivacía donde los carteles anunciando descuentos sirven para hacer bulto ante la falta de clientes y compradores. La crisis golpea duro a Gualeguaychú y el centro de la ciudad es un ejemplo.
Federico Laderach, secretario de Centro de Defensa Comercial e Industrial de Gualeguaychú, indicó que habrá un “pequeño repunte” en el nivel de ventas a partir de junio después de tres meses donde “tocamos fondo” y describió: “Hoy, en comparación con el año anterior, sufrimos una merma abrupta de ventas que está cerca del 60 por ciento”.
Si bien la situación es crítica, el dirigente hace la salvedad que “si se comparan los datos de 2024 con los de años anteriores a la ‘primavera uruguaya’, la caída no es tan abrupta”. “Pero la realidad es que a Gualeguaychú se le esfumó esa particularidad tan especial que se dio durante un años y medio que fue la presencia de los uruguayos que traccionaron las ventas hacia arriba”, analizó.
“Ahora los uruguayos no están y también hay una retracción marcada del consumo de los argentinos”, explica Laderach sobre los motivos del desplome de la facturación de los locales comerciales.
Ante la crisis, “en los últimos meses florecieron las ofertas y descuentos que crearon los comerciantes y que son aprovechadas por los asalariados. Eso hace que traccionen algo más las ventas. Los bancos se están aggiornando a esta nueva realidad y están reapareciendo los créditos de las tarjetas”, señaló -con cierto optimismo- el secretario de Centro de Defensa Comercial.
Laderach sostuvo además que “los corralones tienen un nivel de venta interesante, ya que tampoco fue tan abrupta la caída en los supermercados, aunque sí se notó mucho en las carnes rojas. Sin duda, los sectores más castigados son perfumería y cosmética”.
Aferrarse al segundo semestre
El secretario de Centro de Defensa Comercial opinó que “lo más duros fueron los meses de febrero y marzo”, que “en abril cayeron en un pequeño porcentaje las ventas” y que en mayo “vemos que se detuvo la caída: creemos que lo más bravo ya pasó”.Con una visión positiva, aseguró que “para el segundo semestre somos optimistas y creemos que habrá un pequeño repunte, pero somos prudentes respecto del impacto del último tramo del ajuste de tarifas porque eso puede generar un incremento de costos en la matriz industrial y comercial, generando que se discontinúe con la seguidilla de baja de precios”.
Laderach explica que “a medida que los sueldos se mantienen o logran una mejora por paritarias, se vuelcan al consumo, pero si aumentan las tarifas se van a pagar los servicios”.
“Los precios están cayendo por las pocas ventas existentes, pero no vemos un segundo semestre peor que el primer semestre. Tampoco va a ser bueno porque no se venderá lo mismo que en 2023, pero mejorará frente al primer semestre de este 2024”, reflexionó.
Cuadro tarifario
Consultado sobre la posibilidad de pedir una baja de los costos energéticos, Laderach afirmó que “ni Enersa ni la Cooperativa Eléctrica local son formadoras de precios sino que se rigen por el que fija la mayorista Camesa. Lo que se está gestionando desde las entidades, a través de la Cámara de Diputados, es que no se cargue en la tarifa eléctrica impuestos provinciales y municipales. Eso aliviaría al consumidor final, el comercio y la industria porque hay un peso muy importante de esos impuestos en lo que pagamos de la boleta”.“Tenemos que trabajar en conjunto con la cooperativa para que la provincia deje de recaudar a través de las tarifas. A su vez, habría que redireccionar desde Nación los subsidios porque el sector productivo necesita ser competitivo para poder hacerle frente a las industrias foráneas y generar más trabajo”, agregó.