Se trata del director de Construcciones y el jefe del departamento, Alberto Johnston y Julio Tallar, respectivamente, quienes estaban a cargo de la supervisión de los trabajos, según publicó el sitio digital Ricardo David de Paraná y luego ratificó a El Entre Ríos una importante fuente.
Es que, en mayo de 2019, el organismo provincial confirmó la realización de un sumario administrativo interno que buscaba deslindar responsabilidades ante el evidente deterioro de una obra cuestionada desde sus inicios, incluso con críticas que indicaban que el asfalto se iba deteriorando a medida que se habilitaba cada uno de sus tramos.
La causa fue remitida a la Justicia entrerriana para una investigación penal en la que también se encuentra involucrado el exjefe Guillermo Van Opstal, que no fue alcanzado por la medida del organismo provincial por ya encontrarse jubilado, agregó el mismo portal de noticias.
Actualmente, el Poder Judicial se encuentra investigando si hubo una mala ejecución de la obra o una disminución en los materiales que debían utilizarse, debido a la rapidez con la que se rompió al quedar habilitada unos cinco años atrás, presentando permanentes reclamos por parte de autoridades zonales y transeúntes por su alta peligrosidad.
Una vez finalizada la investigación penal, un tribunal deberá determinar responsabilidades y consecuencias para ambos funcionarios cesanteados, como así también para Van Opstal pese a estar jubilado.