El oficialismo buscó tener una reunión casi protocolar. En el temario solo estaba prevista la designación de una autoridad vacante en la comisión, con directivos y periodistas del canal institucional Diputados TV como invitados. Sin embargo, los bloques opositores -desde el Frente de Izquierda hasta la Coalición Cívica- presentaron notas para tratar otros temas, como el cierre de la agencia Télam, un pedido de informes al vocero presidencial por las acreditaciones en Casa Rosada y una expresión de repudio a las declaraciones del presidente Javier Milei contra periodistas, entre otros.
En medio del debate, el diputado Leandro Santoro (Unión por la Patria) le pidió a la presidenta de la comisión, Emilia Orozco, que se formalice una invitación a 13 periodistas para que den testimonio sobre las agresiones que sufren de parte de gobierno. La legisladora libertaria le respondió: “Tenemos la intención de que toda esa gente concurra, no es una falta de voluntad. Desde la UCR tenemos una nómina de más de 20 periodistas, desde UP 13 periodistas, usted muy bien mencionó otros 13 periodistas más. Desde el FIT tenemos 34 trabajadores de prensa, no solo periodistas. Del PRO tenemos más de 100 personas que quieren asistir. Si les damos 10 minutos a cada uno estamos hablando de más de 17 horas de reunión”.
Luego de esa explicación, la diputada salteña le cedió la palabra a Christian Castillo (Frente de Izquierda), pero Gaillard lo interrumpió. Estalló ante el rechazo de la presidenta de la comisión para habilitar las invitaciones y no le dejó pasar un error: pensó que Santoro estaba proponiendo 13 periodistas además de los que ya había pedido convocar “Unión por la Patria”, cuando en realidad era una misma lista.
“Deje de buscar excusas para no convocar a los periodistas. Le pido por favor que no nos tome de idiotas, hace cinco meses que le estamos pidiendo que convoque a los periodistas”, empezó Gaillard, en un tono más alto al que se venía manejando previamente la reunión. Ahí iniciaron los murmullos y reclamos de otros diputados presentes. “No me interrumpan”, reclamó la legisladora kirchnerista al sector libertario. Por lo bajo, se escuchó una voz femenina responder: “Esta... que se dedicó a interrumpir toda a reunión”.
Apenas Gaillard terminó su alocución, la diputada oficialista Nadia Márquez gritó fuera de micrófono: “Ahora lo entendemos, diputado Valdés (Eduardo, de Unión por la Patria)”. La legisladora de “Unión por la Patria” le respondió: “No seas atrevida, rubia teñida. Bajá el tono que estás violando todo...”. Los cruces siguieron, pero quedaron tapados por la voz de la presidenta de la comisión, que le suplicó a Germán Martínez, jefe del espacio peronista, que calme a su compañera de bloque.“Los hechos contradicen sus dichos. Acá vemos quién es la más violenta”, le insistió Orozco a Martínez, y completó: “Diputado Valdés, no se sienta amedrentado por la mirada de la diputada violenta y tome la palabra”. Una vez más, Gaillard interrumpió para cruzar al otro libertario involucrado en el alboroto: “No te rías tanto Mayoraz que estás recontra complicado por estar en el grupo que visitó a los genocidas”. Sin embargo, el legislador electo por Santa Fe no estuvo ese día en la cárcel de Ezeiza.
Orozco le advirtió que si no se calmaba iba a tener que pedirle que se retire. Gaillard le respondió algo a la presidenta de la comisión que no llega a comprenderse en la transmisión oficial y volvió a causar abucheos entre los presentes. “No voy a permitir la falta de respeto, si no nos llamamos al orden yo llamo a un cuarto intermedio. Toleré bastante hasta este momento”, se quejó la diputada de “La libertad avanza”.
La reunión continuó en un clima tenso con exposiciones de Christian Castillo, Eduardo Valdés, Esteban Paulón y Germán Martínez. Sobre el final, Gaillard tomó el micrófono una vez más para “pedir disculpas por el exabrupto”, pero ante la falta de acuerdo por la invitación de los periodistas volvió a gritarse con la presidenta de la comisión: “Me da impotencia ver que usted se hace la tonta y mira para el otro lado”, le dijo a Orozco.
Sin confirmar la convocatoria a los comunicadores para la semana siguiente, la presidenta de la comisión levantó la reunión y los gritos siguieron mientras los legisladores salían del salón.
La diputada libertaria Lilia Lemoine aseguró en su perfil de la red social X que también fue víctima de agresiones mientras participaba de la Comisión de Libertad de Expresión. Mónica Frade, de la Coalición Cívica, la habría tratado de “boba”. Su posteo fue compartido por el presidente Javier Milei.
Otro que se metió en el escándalo fue Damián Arabia, diputado del PRO, quien felicitó a Orozco “por su templanza y firmeza para llevar adelante una comisión con la violenta de Gaillard”. El presidente de bloque de “La libertad avanza”, Gabriel Bornoroni, también se hizo eco del revuelo en sus redes, donde manifestó que “así actúan los diputados K cuando se les cae el relato. Son violentos e intolerantes”.