En ambos encuentros los asesores técnicos, expertos e ingenieros brindaron información específica sobre el proyecto técnico a los más de 50 participantes que fueron invitados especialmente por su vinculación directa o indirecta con la iniciativa.
En Salto, el secretario general de la intendencia Gustavo Chiriff y el presidente de la delegación uruguaya de la CARU, Mario Ayala, tuvieron a su cargo la bienvenida. Chiriff resaltó la importancia que tiene para la ciudad la navegabilidad del río, mientras que Ayala remarcó que el encuentro era una oportunidad para “brindar certezas a los operadores privados, ya que es una obra estratégica para el desarrollo de la región” y enfatizó sobre la importancia de “escuchar a los protagonistas” en esta zona.
En Concordia, miembros de las secretarías de Desarrollo Urbano, de Turismo y de Ambiente, fueron los anfitriones. Dado que el componente participativo es relevante para la valoración preliminar de los impactos ambientales y sociales, el taller se organizó en dos momentos: la presentación del proyecto y una dinámica de participación grupal.
La instancia expositiva estuvo a cargo de los ingenieros Graciela De León y Hugo Prendes, asesores de la CARU y responsables del diseño del plan, quienes explicaron los aspectos técnicos. “Es un proyecto de carácter adaptativo que busca aprovechar al máximo las condiciones naturales del río, con mínimas intervenciones y bajo costo”, remarcó Prendes. Seguidamente, tomaron la palabra los expertos que participan del ESIAS para dar información específica sobre el medio físico, biológico, socio-económico y de los estudios a realizar.
En la segunda etapa, durante el intercambio con los participantes -en representación de sectores gubernamentales locales, donde además estuvieron presentes las autoridades de la intendencia de Puerto Yeruá y de la Comuna de Nueva Escocia, y de sectores recreativos, institucionales, académicos y privados- valoraron positivamente el impulso que la iniciativa le dará al desarrollo económico de la región, la creación de puestos de trabajo y la disminución de la emisión de gases de efecto invernadero, entre otros. También surgieron inquietudes en relación a las obras, desarrollo e infraestructura complementarias, incidencias en el desarrollo urbano. Los sectores turísticos, pesqueros y ambientales hicieron hincapié en consultas vinculadas a los usos del río y las modificaciones que podrían darse y sobre el cuidado y protección de la fauna ictícola.
Consulta virtual
Como parte del estudio de impacto ambiental y social en el eje participación temprana, también se puso a disposición una herramienta virtual, complementaria a los talleres que están en ejecución, para recibir aportes e inquietudes.Junto al formulario de consulta, se aportó un documento de divulgación para brindar la información básica sobre el proyecto a los interesados. Participaron más de 32 personas: la mayoría a título personal y un porcentaje minoritario en representación de instituciones, de 13 localidades distintas de Argentina y Uruguay. Concordia fue la ciudad que mayor participación tuvo.
Según informaron desde la CARU, la valoración mayoritaria fue positiva y las apreciaciones giraron en torno a la ampliación de la información sobre el proyecto, sugerencias de estudios complementarios, planteos sobre los posibles impactos en los entornos urbanos, e interrogantes sobre la prioridad de la obra.
La consulta permaneció abierta 19 días (del 20 al 7 de agosto). Los resultados fueron sistematizados y se incluirán en el análisis de los impactos ambientales y sociales que se encuentran en desarrollo.