En diálogo con el programa “Lo que queda del día”, por Oíd Mortales Radio, el secretario de Presupuesto y Finanzas de Entre Ríos, Uriel Brupbacher, abordó la situación económica de la provincia en medio de reuniones paritarias con gremios docentes y estatales. Brupbacher destacó la complicada coyuntura económica, marcada por una caída significativa en la coparticipación nacional (20-25%) y una recaudación provincial menor a la deseada. Este contexto dificulta la posibilidad de implementar recomposiciones salariales, pese a los compromisos previos, debido a la escasez de recursos para afrontar los aumentos.
El funcionario declinó siquiera esbozar una oferta posible a los gremios después de la primera reunión de la paritaria establecida para el mes de julio, que tuvo lugar el viernes pasado. En esa reunión, tampoco los gremios docentes dejaron una cifra definida como reclamo de recomposición salarial. En cambio, pidieron “el reconocimiento y pago de las diferencias entre la pauta salarial y la inflación acumulada del semestre pasado”, de acuerdo con lo que publicó Agmer (Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos), el gremio docente mayoritario, en su página web.
Si eso se tradujera en cifras lineales, el reclamo de aumento de los docentes sería de 36,8%, en función de que el acumulado de inflación del semestre fue de 79,8% y los aumentos hasta mayo fueron del 43%. Una cifra fuera de toda posibilidad de discusión.
En este contexto, el Gobierno espera un pedido concreto de los gremios para contraofertar y los sindicatos arrancan el reclamo hablando del “reconocimiento”, con la casi certeza de que la parte que sigue, la de “pago de las diferencias entre la pauta salarial y la inflación acumulada del semestre”, será motivo de una negociación más larga y complicada.
“Hablar de recomposición salarial con esta caída de la recaudación es un oxímoron”, describió Brupbacher y en un pasaje descontracturado de la entrevista exageró: “nosotros tendríamos que estar ofreciendo un descuento del 25% más que un aumento”.
Aunque en términos severos, advirtió que en este contexto la provincia de Entre Ríos destina casi el 90% de sus ingresos para pagar sueldos y pensiones y que con apenas el 10% restante tiene que “mantener los hospitales funcionando, los patrulleros en las calles, las escuelas y la Justicia funcionando”, enumeró, y alimentar el incipiente reinicio de la obra pública apuntando a la dinamización de la economía y a sostener un mínimo de infraestructura en condiciones.
Remarcó que “previo a la charla de las paritarias, nos encontramos con una caída más que importante en lo que es la coparticipación nacional, que ronda el 20% y el 25% y eso obviamente se siente, estamos a niveles de recaudación y de coparticipación parecidos a los que había en pandemia, con el agravante que en pandemia había un montón de actividades del Estado que habían quedado suspendidas. Así que el escenario actual es muy complejo”, insistió.
Dijo que la recaudación de la provincia “está un poquito más estable, pero no obviamente en los niveles que desearíamos. Mucho se está compensando porque salieron tarde las emisiones del Impuesto Inmobiliario y del Impuesto Automotor, pero sí nos preocupa el impacto que todo esto está teniendo en nuestra gran fuente de recaudación, que es Ingresos Brutos”.
Abundó que en “los dos impuestos al consumo son los que más se nota la caída, el IVA a nivel nacional e Ingresos Brutos a nivel provincial y eso es lo que alarma, porque eso también pone foco, pone la alerta en las variables macros, donde demuestra que el consumo no arranca, que la economía no despega, que hay mucha estabilidad en los números macros que se muestran desde el Tesoro Nacional, pero en la macro y en la micro no arranca, que es lo que nos preocupa”.
Yendo a la recomposición salarial, dijo que “estábamos esperando el planteo de los gremios y nosotros en función de eso llegaremos a un punto de acuerdo respecto de ese quantum, por decirlo de alguna manera. Obviamente también después va a haber otra charla y otra discusión sobre el “cómo”. Sí podría haber recursos o no, para hacer frente a eso”, advirtió de entrada.
Remarcó que “no es fácil hablar de recomposición salarial con esta caída de la recaudación, digamos que también es un oxímoron plantearlo en ese sentido. Tenemos una curva de ingresos en caída y plantear salarios en crecimiento o recomposiciones salariales sería también, de nuestro lado, hacer promesas que no se puedan cumplir. Así que tenemos que ser muy responsables en ese aspecto”, dejó avisado.
Respecto del anuncio del gobernador a comienzos de la gestión acerca de que las recomposiciones salariales iban a ser en función de las posibilidades que daba la recaudación, respondió que “cuando nosotros hablábamos con los gremios, hacíamos este planteo y llegado a este caso de hoy, nosotros tendríamos que estar ofreciendo un descuento del 25% más que un aumento”, exagerando el escenario.
Dijo que pese a que el panorama es tan complejo, “en esto hemos tenido una recepción y un entendimiento respecto a la situación real. Cada vez que hemos tenido oportunidad de charlar con los gremios y sentarnos y mostrarles los números crudos de la provincia, porque es algo que nos instruyó el Gobernador, esto de no esconder nada de los números de la provincia para poder mostrarle a la sociedad primero en qué estamos gastando, cómo lo estamos gastando y cuál es la complejidad de esta situación tan apremiante”.
“Porque no es que uno ahorra o se guarda algún dinero para poder hacer obra pública o para poder tomar alguna otra decisión política”, expresó. “Acá estamos hablando de ver si podemos o no pagar los sueldos y ver si podemos o no seguir prestando los servicios como lo estamos prestando hoy”, remarcó.
E insistió en que “no hay margen para achicar más el gasto, porque en términos sencillos y prácticos, para que todos entiendan, tenemos que mantener los hospitales en funcionamiento, tenemos que mantener los patrulleros recorriendo las ciudades, tenemos que mantener la seguridad pública, las escuelas abiertas…”.
Precisó que “hoy estamos a niveles cercanos al 90% del gasto de lo que ingresa mensualmente destinado a sueldo, el margen que queda es muy chico. Estamos reactivando algo de obra pública porque también en esta cuestión que hablamos al principio del consumo, nosotros sabemos que la obra pública dinamiza de manera indirecta el consumo, porque son empleos de trabajo, hay gente movilizándose”.
Expresó que “estamos todos esperando y deseando que esto se encamine. A veces es muy criticado el Gobernador respecto a la posición que tiene con el Gobierno Nacional, pero estamos todos con la expectativa que el Gobierno Nacional le encuentre la vuelta a esto y que esto arranque, porque indirectamente también es parte del resultado que nos puede beneficiar en la provincia”.
“Si esto se activa, -agregó- si empieza a girar la rueda, si el consumo empieza a funcionar y viene mejor la recaudación y mejorar también la coparticipación, por ahí la cosa es diferente. Pero hoy es una situación delicada y compleja en la que se está viviendo”.