Según trascendió, el Padre Mario Taborda, actualmente párroco de San Benito, sufrió el robo de su celular, le hackearon la cuenta de WhatsApp, redes sociales y ofrecieron dólares a sus contactos, algunos de los cuales cayeron en la estafa, llegando a transferir importantes sumas de dinero.
En la capital entrerriana, se radicaron dos denuncias. Y sobre el tema, la Comisario Principal Eliana Galarza, Jefa de la División Delitos Económicos de la Policía de Entre Ríos, explicó que “la semana pasada tomamos conocimiento e intervención ya que el Padre Taborda, se acercó a la División y denunció que había sufrido el robo de su celular, posteriormente se percató que todos sus contactos habían empezado a ser contactados, supuestamente por él, ofreciendo dólares”.
Los malvivientes, “se alzaron con la cuenta de WhatsApp, Facebook e Instagram y a través de estas aplicaciones comenzaron a enviar mensajes” a quienes estaban en la agenda de contactos del Padre y ofrecer el negocio con los billetes estadounidenses.
Lamentablemente, al menos dos personas cayeron en la trampa y transfirieron dinero pensando que era el Padre Taborda quien solicitaba la venta de dólares para poder realizar obras en la parroquia. Una de las damnificadas llegó a depositar unos 250.000 pesos.
Con el robo de los celulares, los delincuentes adquieren una gran cantidad de información la cual es usada para posteriormente armar el ardid y solicitar dinero o, en este caso, la venta de dólares para obras de caridad.
“Si hoy en día nos ofrecen dólares a través de WhatsApp tenemos que desconfiar y al momento de hacer una transferencia tenemos que ver personalmente a la persona y constatar los datos”, recomendó Galarza.
Secuestro extorsivo virtual
Por otra parte, la Jefa de Delitos Económicos, mencionó que, durante el fin de semana, el 911 y distintas comisarías de Paraná recibieron una ola de denuncias por los conocidos secuestros extorsivos.Vale recordar que en esta modalidad, los afectados reciben llamados a la línea fija en horas de la madrugada donde se hacen pasar por familiares en situación de riesgo, incluso llorando, indicando que para ser liberados deben entregar una cierta cantidad de dinero a una persona que pasará por la vivienda a retirarlo.
“Recomendamos que tengan presente esta modalidad y cortar el llamado cuando lo reciban y contactar el familiar por otro medio”, sugirió Galarza. Y aclaró que afortunadamente no se concretó ninguna estafa, sólo fueron tentativas.
