Concretamente, alrededor de 100 kilos de boga fue secuestrada por las autoridades presentes. Pero, además, hubo momentos de tensión cuando un vehículo vinculado a los pescadores furtivos emprendió la fuga al percatarse de la presencia de efectivos de Prefectura. Finalmente, fueron alcanzados e identificados. Infraganti, entonces, fueron encontrados estos pescadores a los que se les secuestró el material utilizado, se los identificó y se los dejó en libertad. En el procedimiento intervino el personal de Prefectura Salto Grande, los efectivos de la Comisaría Quinta de la Policía de Entre Ríos en Concordia, e inspectores de la Dirección Agroalimentaria, todos con conocimiento de la Justicia ordinaria.
La pesca ilegal sucede con frecuencia en esa zona del río Uruguay, en el Departamento Concordia. Fuentes consultadas por El Entre Ríos contaron con asombro la presencia de hombres que, a nado, con salvavidas, anzuelos y líneas, se tiran al agua en la zona de seguridad de la represa.
Así ponen en riesgo sus vidas a cambio de obtener mejores piezas en la pesca; a la vez que cometen una contravención al ingresar en una zona prohibida para esa actividad.