Daniel Salinas, ministro de Salud Pública del Uruguay, bajó la escalera y saludó a la prensa, no con el puño, sino con la mano entera. ¿Un indicador de la vuelta a la normalidad? Con un gesto, pareció decir que sí, pero acotó: “Ómicron ya se siente en el aire”.
Aumento de casos
Eso fue el 21 de diciembre y, efectivamente, ómicron estaba en el aire: según informó el miércoles el Grupo de Trabajo Interinstitucional en Vigilancia Genómica de SARS-CoV-2, 44 de las 311 muestras que recibieron los laboratorios para analizar entre el 20 y el 23 de diciembre eran de ómicron, así como la muestra de un paciente al que habían hisopado el 14 de diciembre y que tenía antecedentes de viaje, por lo que se considera que la nueva variante ingresó a Uruguay ya en la primera mitad de diciembre.En diálogo con la prensa, Salinas había informado el miércoles que ese y los siguientes días habría más de 1.200 nuevos casos (fueron 1.417 y este jueves 1.348).
La vacunación, clave
El ministro recomendó vacunarse, usar tapabocas en lugares cerrados, evitar asistir a eventos multitudinarios en espacios cerrados y mantener la higiene de manos, pero aclaró que “hay indicios de una menor gravedad y menor internación en CTI”, particularmente entre quienes recibieron las tres dosis.El efecto de la vacunación se ve en el nivel de internación en CTI. Según publicó en Twitter en la tarde del jueves el presidente de la Sociedad Uruguaya de Medicina Intensiva, Julio Pontet, de las 25 personas internadas en CTI por coronavirus, 19 no estaban vacunadas y 6 sí (cuatro personas habían recibido dos dosis de Pfizer y dos, las de Sinovac).
Fuentes del MSP informaron a la diaria que lo fundamental es que 50% de la población esté inmunizada con la tercera dosis, proporción que ahora se sitúa en 43%; también se buscará ampliar la vacunación con la inmunización a niños de cinco a 11 años, que comenzará el 12 de enero.
Convivir con el virus
El 21 de diciembre, el Ministerio de Salud Pública (MSP) aprobó una ordenanza con modificaciones en las indicaciones de testeo y cuarentena en la que restringe para algunas situaciones el uso de test diagnósticos de PCR (alcanza con el de antígenos) y establece que quienes tienen dos dosis y son asintomáticos no deberán hacer cuarentena mientras esperan el resultado del test (a no ser que convivan con personas con Covid o integren comunidades cerradas), y que quienes recibieron las tres vacunas no tienen que hacerse test ni cuarentena en caso de ser asintomáticos (a excepción de convivientes, integrantes de comunidades cerradas o si integran brotes).Esa flexibilidad coincidió con el aumento de casos, que ahora se atribuye a ómicron, pero las fuentes del MSP aseguraron que pese a la detección de la nueva variante, no se cambiará el algoritmo. “Seguimos con las mismas medidas”, reafirmaron, señalando los cuadros clínicos leves y la escasa incidencia en hospitalización en CTI y en muertes que está mostrando tener ómicron a nivel mundial.
Considerando que se ha visto que ómicron tiene un período de incubación o de contagio más breve, según supo la diaria, el MSP está revisando los criterios de la extensión del período de aislamiento de personas asintomáticas, que hasta ahora es de diez días en Uruguay y también en Estados Unidos, cuyo Centro de Control de Enfermedades propuso, el lunes 27, reducirlo a cinco.
Entre todos los escenarios que mira el MSP también está el de Israel, que con un alto nivel de vacunación estudia cambiar su estrategia contra la Covid-19 para promover un “modelo de contagio masivo” con ómicron, aprovechando que es una variante menos letal y que, a un bajo riesgo, la población puede sumar anticuerpos a los ya generados por la vacunación y la inmunización natural.
Síntomas
La viróloga Pilar Moreno explicó que ómicron tiene síntomas más leves gracias al nivel de vacunación a nivel mundial y porque “esta variante replica o, en otros términos, se multiplica más en el tracto respiratorio superior que en el inferior, que es el pulmonar, entonces la enfermedad es más leve, los síntomas son más leves: es un resfrío, un dolor de garganta, fiebre”.Susana Cabrera, médica y docente de la Cátedra de Enfermedades Infecciosas de la Universidad de la República, explicó que ómicron fundamentalmente genera síntomas respiratorios leves, como rinitis, mientras que otros pueden pasar hasta desapercibidos. Al igual que Moreno, señaló la incidencia que ha tenido para ello, en parte, el nivel de vacunación. Añadió que se estima que no provocará tantas hospitalizaciones, casos de gravedad y muertes como lo hicieron otras variantes, aunque aclaró que “recién estamos viendo los primeros casos”. La principal diferencia con las demás variantes es lo fácil que se contagia, pero el impacto final parece ser menor, consideró.
Fuente: La Diaria.