Con la difusión de un comunicado, el Arzobispado de Paraná dejó oficializada la suspensión de actividades que impliquen concurrencia de personas (celebraciones litúrgicas, actividades de grupos y catequesis), entre los días 22 y 30 de mayo.
La medida se implementará “en todo el territorio que comprende la Arquidiócesis (excepto el departamento Feliciano) que se encuentra enmarcado en la situación epidemiológica Nº 1”, explicaron desde el Arzobispado, con una advertencia: “Para situaciones excepcionales, que requieran especial atención y/o discernimiento, se deberá consultar al vicario general o al arzobispo”.
Esta decisión se tomó luego de conocer las disposiciones establecidas por las autoridades nacionales y asumidas por el gobierno provincial, en el marco de la segunda ola de contagios de Covid-19, según indica el escrito difundido este viernes.
“Si bien estas disposiciones limitan nuestra atención pastoral y nos duelen como pastores, alentamos a los sacerdotes a que 'con manos creativas en la caridad activa’ se encuentren disponibles, en la medida de sus posibilidades, para atender al bien espiritual de nuestros fieles”, alentaron desde el Arzobispado de Paraná.
Además, se comunicó que durante este período, quedará suspendida la atención al público tanto en la Librería San Francisco Javier, como en las oficinas de la Curia. De todas maneras, habrá una guardia telefónica para las siguientes áreas:
Tesorería: 343 46220763
Escuelas y Administración: 343 4732357
Fuente: El Once / Prensa Arzobispado de Paraná