Se dedica al fútbol hace casi dos décadas y cuenta con un sorprendente recorrido que lo llevó desde su Concordia natal hasta España y una estadía en Egipto. Con 40 años y un par de meses después de haber echado a rodar su carrera como entrenador principal, Luca Marcogiuseppe empezó a sonar con mayor fuerza en el ambiente del fútbol grande.
Su primera experiencia como DT de un equipo principal la está realizando en Real Pilar, equipo que milita en la Primera C y por estos días lucha por el 2° ascenso a la Primera B Metropolitana, luego de haber perdido la final ante Cañuelas (tenía ventaja deportiva) pese a empatar sin goles. Su próximo objetivo es Ituzaingó, por los cuartos de final, el sábado desde las 17.10.
En sus inicios Luca trabajó en las inferiores del Club Salto Grande de Concordia, donde como Coordinador se dedicó a darle las primeras herramientas futbolísticas a cientos de chicos. Entre ellos: Marcos Senesi (hoy en Feyenoord de Holanda), Lucas Robertone (Almería), Leonardo Godoy (Estudiantes) y Erik Ramírez y Germán Guiffrey (Gimnasia de La Plata).
Su referente máximo en la conducción técnica siempre fue Marcelo Bielsa y hace una década tuvo la posibilidad de cumplir el sueño de trabajar en su staff, cuando el “Loco” dirigió al Athletic Club de Bilbao (España) entre 2011 y 2012. “Me comuniqué con él para conocer su método, me llamó para ser scouting de la liga española y me terminó contratando. Fue un año intenso, estoy eternamente agradecido”, expresó sobre aquella experiencia.
Al regreso continuó con la formación de juveniles en Vélez Sarsfield, Gimnasia y Esgrima La Plata –llegó a ser ayudante de Pedro Troglio- y Racing Club de Avellaneda, para recalar en Unión de Santa Fe, donde llegó a ser asistente de Leonardo Madelón en Primera división.
En el “Tatengue” admitió sentirse a gusto, tanto que rechazó la oportunidad de trabajar junto a Ricardo La Volpe en el Pyramids de Egipto, donde tras la primera práctica, decidió tomar la decisión de volverse.
La actualidad lo encuentra peleando por un ascenso a la B Metropolitana, en un arranque promisorio de una carrera que tiene mucha proyección.
Fuente: El Entre Ríos