Si bien se reconoce que -hace ya tiempo- se ha perdido el hilo conector de los nexos de contagio, se estima que, por la edad de los pacientes, el principal foco de propagación de la enfermedad se estaría dando en grandes aglomeraciones sin respetar los protocolos de seguridad, apuntando principalmente a fiestas clandestinas, pero también a los grupos que se concentran en espacios abiertos como playas y parques.
En ese sentido, profesionales de la salud confirmaron que los casos que se suman como positivos de COVID 19 pertenecen, en más de un 80%, a personas comprendidas en una franja etaria joven, más precisamente entre los 25 y apenas por encima de los 35 años.
Las fiestas bailables figuran como el principal motivo confirmado, ratificado esto por el caso emblemático de un grupo de amigos que se encargó de organizar varias de estas reuniones y en su absoluta mayoría forman parte de los reportes oficiales de contagio.
Como así también, no faltan algunos casos de jóvenes que comenzaron con los síntomas luego de haber participado en las polémicas fiestas “autorizadas” en ciudades cercanas a Concordia.
Los médicos consultados reconocen que la absoluta mayoría de estos pacientes están atravesando la enfermedad sin complicaciones severas, pero remarcaron que la preocupación está dada en que, así, se multiplica la posibilidad de terminar contagiando a un familiar del llamado grupo de riesgo, con la consecuente saturación del sistema de salud.
Fuente: Diario Río Uruguay