Ya pasaron más de siete meses desde que se decretaron en la Argentina las primeras medidas para intentar frenar el avance del Covid-19. Los últimos anuncios de la proximidad de una vacuna para prevenirlo y el fin del confinamiento estricto en las diferentes regiones generan grandes expectativas. Pero a la par de esta situación, en distintos países del mundo que ya habían superado sus fases más críticas se habla de un rebrote del virus, de una nueva ola que echa por tierra la ilusión de erradicarlo definitivamente, al menos en lo inmediato.
El jueves anunciaron en Italia el cierre de cuatro regiones, señaladas como “zonas rojas”, debido a la cantidad de nuevos contagios que se produjeron desde octubre a la fecha. Los casos se multiplicaron por 10, y esto llevó a las autoridades a decidir que desde el viernes hasta el 3 de diciembre nadie pueda entrar ni salir de Lombardía, Piamonte, Valle de Aosta y Calabria. Tampoco se permiten los desplazamientos internos en los municipios y ciudades si no es por motivos justificados como trabajo o salud.
Elin Rodríguez, comunicadora social oriunda de Paraná, vive en Italia desde principios de este año y comentó: “Actualmente me encuentro viviendo en Torino, que pertenece a la región del Piamonte, al norte de Italia. Desde el viernes, rige un nuevo decreto, con algunos cambios, ya que los casos han empezado a subir muchísimo. Ante esta nueva situación han dividido a Italia en tres grandes regiones, denominadas como ‘zona roja’ la que está con un riesgo muy alto. Con el color naranja se identifica a los lugares con riesgo alto, donde incluso hay cierres de bares y restaurantes, y se prohíbe moverse al interior de las regiones y entrar y salir de las mismas. Y las regiones amarillas, que tienen un riesgo moderado, donde se cumplen asimismo las medidas nacionales”.
Refirió que “estas medidas, incluidas en el decreto, establecen una especie de toque de queda desde las 22 a las 5, que hay que cumplir, excepto por motivos laborales o de salud. Estamos obligados a usar el barbijo todo el tiempo, aun al aire libre. Y los menores, a partir de los 6 años, también deben llevarlo puesto durante todo el día en la escuela, incluso cuando están sentados en los bancos, excepto por cuestiones médicas, y deben respetarse las medidas de distanciamiento”.
Por otra parte, contó que el transporte público, que estaba funcionando al 80% de su capacidad, se redujo al 50%. También cerraron las muestras, los museos, las salas de juegos, cines, teatros, gimnasios, piscinas; los centros comerciales no abren los fines de semana, entre otras medidas, que se establecieron en este país que ya superó la barrera de 40.000 víctimas desde el inicio de la pandemia.
A su vez, subrayó que se puede salir a hacer actividades físicas, siempre usando tapabocas, pero está prohibido realizarlas en grupos. Y en cuanto a lo laboral, se pide que las oficinas públicas y privadas tengan el trabajo remoto al máximo posible.
Según explicó, dentro de dos semanas se evaluarán los números de contagiados y se definirá si la región en la que vive se sigue con las medidas correspondientes a la “zona roja” o se recategoriza, al igual que los demás sectores del país. “Es por 15 días, porque luego se actualizan los números, y a partir de ahí se resuelve si seguimos con zona roja, es decir, con la prohibición de circular, de entrar y salir de la región, a menos que sea por razones justificadas, como laborales, de salud, urgencias, para hacer alguna compra o algo que haya que adquirir. Por supuesto que nuestras salidas son con autorización, en la que explicamos cuál es el motivo por el que nos movilizamos. Los negocios están cerrados, excepto los de alimentos, kioscos, farmacias, ventas de revistas, las librerías, las lavanderías, las perfumerías, peluquerías y barberías; también los que venden artículos para niños, ya sea ropa o juguetes, artículos informáticos, deportivos, ópticas y ferreterías. Y en cuanto a los restaurantes, heladerías y demás están cerrados, ofreciendo solo servicios a domicilio por delivery hasta las 18”.
En España
En tanto, Fernando López, periodista que se mudó desde la capital entrerriana a España, un país que desde hace unas semanas implementó una nueva serie de medidas ante el aumento de casos de Covid, señaló a UNO: “Ahora en Madrid, que es donde yo estoy, hay ciertas restricciones, por ejemplo, desde las 12 de la noche a las 6 no se puede salir, y durante este fin de semana largo, en el que se conmemora la festividad de la Virgen de Almudena, hubo otras prohibiciones, estableciendo que no se puede entrar ni salir por ciertas zonas que están delimitadas por centros de salud, por ciudades y por barrios”.También comentó que hay regiones y comunidades en España donde registran importantes rebrotes en cuanto a cantidad de casos, aunque aclaró que no es lo que pasa en Madrid, donde “las cifras de contagios están bajando”. Al respecto, aseguró: “Si comparamos con las medidas tomadas en marzo y abril, estamos teniendo una vida relativamente normal. La gente anda en la calle, se junta mucho en los bares, los lugares históricos de Madrid reciben gran cantidad de visitas. Actualmente no hay confinamiento domiciliario, como hubo antes. Sí está la obligatoriedad de usar barbijo”.
Tercera ola de CoronavirusPor su parte, Adrián Peto, oriundo de Libertador San Martín pero radicado hoy en Hong Kong, contó que en la región atraviesan ya una “tercera ola de coronavirus”. Sobre este punto, remarcó: “Hemos tenido tres olas de coronavirus. En la primera hubo bastantes restricciones, se cerraron las escuelas como primera medida, los grandes parques, museos y todo lo demás. Entre fines de mayo y comienzos de junio, cuando habían declinado los números de contagiados, se reabrieron algunas actividades, pero tuvimos una segunda ola, que fue relativamente corta. Ahora ya hemos pasado la tercera ola, que en Honk Kong fue la más mortífera, si bien los números son bajos comparados con el resto del mundo. En las dos primeras fases no habíamos pasado creo los 10 o 15 casos de personas fallecidas por causa del coronavirus, pero en esta tercera ola murieron más de 100 personas”.
“Acá la llamaron tercera ola a esta etapa, pero coincide con la segunda ola de Europa. Ahora estamos volviendo a la normalidad, y desde hace un mes aproximadamente se empezaron a reabrir incluso las iglesias y las escuelas. En ninguna de las tres olas hubo cuarentena obligatoria. Se podía salir si queríamos, siempre usando máscaras, y aunque no era una imposición eso nunca se discutió y ayudó a que no haya tantos contagiados; pero en esta tercera ola se hizo obligatoria su uso”, dijo a modo de conclusión.
Fuente: Diario Uno