Pedido

Durante una visita, ambientalistas reclamaron a Bordet que “deje de fumigar a los gurises”

El gobernador de Entre Ríos estuvo este martes en Pueblo Belgrano, Departamento Gualeguaychú, para anunciar obras de gas natural. Allí la Asamblea Vecinal Socioambiental de la ciudad le expresó su repudio por el decreto que habilita las fumigaciones.

La imagen expresa más que mil palabras: una de las más activas integrantes de la entidad enfrentó al mandatario entrerriano para que viera la frase que enarbola su cartel: “Bordet, decretaste fumigar la gurisada”. La norma del Ejecutivo entrerriano redujo la franja de seguridad de las pulverizaciones con agrotóxicos a apenas 100 metros terrestres y 500 aéreos.

Tal como estaba anunciado, el gobernador Gustavo Bordet estuvo este martes 26 en Pueblo Belgrano para firmar junto al intendente Mauricio Davico la llegada de la red domiciliaria de gas natural, obra presupuestada por 35 millones de pesos y con un plazo de ejecución de 180 días. Además de ese anuncio, estaba previsto entregar un subsidio a los Bomberos Voluntarios de la localidad.

Pueblo Belgrano, que cuenta unos 3.000 habitantes, nació como municipio en 2007, y su comunidad tiene una fuerte conciencia ambiental, marcada por las luchas ambientales de Gualeguaychú: es la única localidad entrerriana, hasta el momento, que cuenta con una ordenanza que consagra la Licencia Social como derecho de su población, es decir, la idea de que cualquier emprendimiento que pueda afectar el ambiente o la vida de la comunidad, requiere la aprobación social.

Victoria Veronesi, docente y activa integrante de la Asamblea, confrontó al titular del Ejecutivo entrerriano con una de sus decisiones más controvertidas: el decreto N° 4.407 que redujo la franja de seguridad de las pulverizaciones con agrotóxicos a apenas 100 metros terrestres y 500 aéreos. El decreto de Bordet fue el resultado de las presiones de las entidades rurales ante la prohibición que había establecido la Justicia provincial, cuando el Superior Tribunal hizo lugar a un amparo ambiental presentado por el gremio docente AGMER y la Coordinadora Provincial por una Vida sin Agrotóxicos “Basta es Basta”. La justicia había fijado el límite en un radio de 1.000 metros para las aspersiones terrestres y en 3.000 metros en caso de ser aéreas. El decreto de Bordet redujo esas distancias a 100 y 500 metros y esa decisión provocó la reacción de los ambientalistas.

“Hace un rato vino el gobernador Bordet a Pueblo Belgrano. También estaba el secretario de Ambiente de la provincia”, cuenta Victoria en su muro en Facebook. “Con compas de la Asamblea Vecinal Socioambiental de Pueblo Belgrano, como en reiteradas oportunidades, expresamos nuestro repudio al decreto provincial que pretende reducir la franja de seguridad de las pulverizaciones con agrotóxicos en cercanías a las escuelas (…) a 100 metros terrestres y 500 aéreos. Si eso no significa decretar fumigar la gurisada… ¿qué significa?”, se pregunta la docente.

La Vecinal Socioambiental de Pueblo Belgrano, que sostiene que es posible una producción y una vida sin agrotóxicos, y afirma sin dudarlo: “La agroecología debe ser una política de Estado, de modo urgente!”.

Fuente: El Miércoles Digital