El Ministerio de Salud dispuso la cesantía del enfermero Carlos Alberto Zalazar, con desempeño en el Hospital Domingo Cúneo, de Victoria, quien fue condenado a 20 años de cárcel y cumple sentencia en la Unidad Penal de Victoria luego de haber sido hallado culpable de los delitos de abuso sexual simple reiterado calificado y abuso sexual agravado calificado.
El 24 de febrero de 2022, el Tribunal de Juicios y Apelaciones de Gualeguay dictó condena y declaró a Zalazar autor “material y penalmente responsable de los delitos de abusos sexuales simples reiterados y agravados por ser el imputado guardador de la víctima y por la convivencia preexistente con una menor de 18 años de edad; abusos sexuales con acceso carnal reiterados y agravados por ser el imputado guardador y por la situación de convivencia previa con una menor de dieciocho años de edad; y abusos sexuales con acceso carnal reiterados”, y lo sentenció a 20 años de prisión, “debiendo cumplir la condena en la Unidad Penal N° 5 de la ciudad de Victoria o en la que oportunamente se determine perteneciente al Servicio Penitenciario Provincial”.
El 25 de octubre de 2023, la Cámara de Casación Penal de Paraná rechazó el recurso de casación de la defensa de Zalazar y confirmó la condena.
Los hechos que le imputaron al enfermero del Hospital Cúneo señalaron: “Que, aprovechando su relación de convivencia y siendo el guardador de D. B. M., abusó sexualmente de la nombrada en reiteradas oportunidades, no pudiendo saberse en cuántas, pero desde que la denunciante tenía 6 o 7 años de edad, el imputado habría abusado sexualmente de ella mediante tocamientos en sus partes íntimas como así también instando a la víctima a que le tocara los genitales; posteriormente, cuando M. tenía alrededor de 11 años, Zalazar le habría manifestado que le iba a mirar sus partes, la habría puesto en posición cuadrúpeda y la habría penetrado sexualmente; cuando la menor tenía trece años de edad, le sacaba fotos de sus partes íntimas, para luego decirle que si no estaba con él divulgaría las fotos, habiéndola abusado sexualmente con penetración en al menos tres o cuatro veces entre los trece y quince años, continuando luego con las abusos sexuales en forma constante, manoseando a la víctima hasta poco tiempo antes que se efectuara la denuncia en diciembre de 2018; incluso, Zalazar le habría tomado las últimas fotografías íntimas en el mes de Julio del año 2018”.
Los hechos se habrían ocurrido en el domicilio donde Zalarzar convivía con su pareja, y con la hija de ésta, “produciéndose tales actos en momentos en que su madre se retiraba del hogar a trabajar”.
Desde el Estado, destacaron que “lo que aquí se analiza es la responsabilidad administrativa del agente, en virtud de la relación de empleo público, en tal sentido calificada doctrina ha expresado que ´el ejercicio de la potestad sancionadora del Estado, requiere siempre como presupuesto de su existencia, una falta y para que exista la falta disciplinaria, la conducta que la consuma debe estar así considerada por el ordenamiento aplicable y mencionarse expresamente entre las prohibiciones que rigen la relación de empleo público” .
Y sentenció que “el presupuesto de viabilidad del presente sumario, esto es la sentencia condenatoria firme por un delito doloso no referido a la Administración Pública, se encuentra acreditado, encuadrando la conducta del agente Carlos Alberto Zalazar en la causal de cesantía referida. Por otra parte, resulta indiscutible que la grave condena que recibiera el sumariado, que se encuentra privado de su libertad en la Unidad Penal N° 5 de Victoria, evidentemente ha causado impacto entre sus superiores y compañeros de trabajo, lo cual, sin lugar a dudas, afecta el prestigio de la función y del agente, e indefectiblemente deviene írrito a las condiciones de conducta exigibles a todo agente público”.
Finalmente, Salud dispuso su cesantía, medida contenida en el decreto N° 3.489, del 19 de noviembre último, publicado este lunes 16 de diciembre en el Boletín Oficial.
Fuente: Entre Ríos Ahora