Concordia

El río sube y la historia se repite; el club Comunicaciones evacúa

Aunque el río no haya llegado a la altura del club Comunicaciones, ya decidieron evacuar el lugar como precaución.

Por: Agostina Zilloni*

Concordia ha sido testigo de muchas inundaciones a lo largo de los años. La última más recordada seguramente sea la de 2015 cuando, en vísperas de Navidad, la altura del río Uruguay llegó a rozar los 16 metros y provocó la evacuación de más 11.000 personas. En esa instancia la ciudad recibió la visita del entonces presidente de la nación, Mauricio Macri y fue considerada la peor inundación desde 1959.

En 2017 y en 2019, también hubo una creciente del río, el cual llegó alrededor de los 14 metros.

Hace una semana CTM (Comisión Técnica Mixta de Salto Grande) anunció que el río pasaría a medir más de 9 metros. Hoy, se ubica por los 10,50 metros (según los últimos datos disponibles).

Evacuación preventiva
Si bien el club Comunicaciones, ubicado en la Costanera, no es alcanzado por el agua hasta que el río no llega a una altura de 11,80 metros, ya se tomó la decisión de evacuar por precaución.

“La creciente del río nos afecta primero en términos sociales y segundo en términos económicos. En términos sociales nos afecta en que, obviamente, si el río ingresa al club no podemos seguir con las actividades normales como el entrenamiento de todas las categorías inferiores y también de la Primera División. Hoy en día, en el club participan 250 niños, niñas y adolescentes desde los 4 años hasta los 17. Además está el plantel que juega en Primera División del fútbol local de Concordia y no podríamos seguir con esas actividades en nuestro predio”, dijo Facundo Pérez, integrante de la institución.

“En términos económicos lógicamente también nos afecta porque tuvimos que sacar todo lo que tenemos en el club. A pesar de que contamos con ayuda de un montón de gente, sobre todo con la ayuda de todos los que son parte de la comunidad del club o la familia canaria, como le llamamos, que está compuesta por padres, madres, profes, técnicos, jugadores, ex jugadores, hinchas; hay determinados gastos en los que tenemos que incurrir como lo son los fletes o el lugar donde dejamos las cosas, que en este caso conseguimos un lugar que nos lo dan gratuitamente, pero durante el tiempo que el club llegará a estar bajo agua obviamente que no podríamos percibir los ingresos que ordinariamente percibimos por las distintas actividades que desarrollamos, tenemos una cancha de futbol de césped sintético que estaría clausurada durante un tiempo que no sabemos cuál sería”, siguió Facundo.

Las medidas que han tomado esta semana y que, continuarían haciendo, fueron sacar la mayoría de cosas que hay en el club. Una de las tareas que más les preocupaba era poder cubrir la cancha de césped sintético. “La idea es hacer todo lo que nos falte para que no haya nada adentro del club y podamos tener el menor daño posible”.

La familia canaria podrá seguir desarrollando sus actividades en el club hasta que no ingrese el agua, si esto llegara a suceder, Facundo dijo que el club buscaría opciones para que “los chicos puedan seguir entrenando en otras canchas o en otros lugares; siempre hay disponibilidad, siempre hay disposición por ahí de otros clubes que ya se ofrecieron a prestarnos sus instalaciones o en otros lugares públicos. La idea es que los chicos y las chicas no dejen de entrenar”.
Comparación con otras inundaciones
Esta no es la primera vez que el club podría llegar a inundarse y por eso es parte de su planificación tener en cuenta esta cuestión. La diferencia, expresó Facundo, sería que “esta vez tenemos muchas más cosas para sacar del club, entonces el trabajo que necesitamos hacer para mitigar el daño es mayor, por eso nos estamos preparando con mayor tiempo de anticipación que otras veces”.

Según Facundo, hace cuatro años que el club no se inunda, desde julio de 2019 y para él, comparándolo con otros años, esto no es tan común y se debe a las obras hechas en la Defensa Sur y en la Costanera. “Antes con menos de 10 metros el club ya estaba inundado y hoy en día todavía no ingresó el agua. La situación es distinta a lo que sucedía en otras épocas pero eso no significa que no sea una zona inundable sino que hemos ganado metros, todavía estamos con posibilidades de llegar bien y de poder seguir trabajando ahí pero con la precaución de que puede llegar el agua”, explicó.

Por ahora han sabido resolver la situación con ayuda de los integrantes del club que ofrecen prestar sus vehículos o su disposición para trasladar las cosas de lugar, pero si la inundación efectivamente aconteciera, solicitarían ayuda del estado en forma de “algún reintegro o alguna compensación por todos los gastos que estamos teniendo y por los no ingresos que tendremos durante un tiempo en caso de que efectivamente el agua ingrese al club y tengamos que evacuar”.

“En la zona hay sobre todo negocios que por ahora no han sido evacuados en su totalidad, sí algunos de a poquito han ido sacando sus cosas pero aparentemente en los próximos días no habría un avance muy significativo del río pero está ahí, en una altura que cualquier crecida repentina significaría que avance mucho”, finalizó Pérez.

*Estudiante de 2° año de la Tecnicatura en Comunicación Social del IPC (Instituto Profesorado Concordia).

Fuente: El Entre Ríos