Informe de CECNEA

El sector citrícola, entre la buena producción y las complicaciones para movilizarla

Mediante un informe, la Cámara de Exportadores del Citrus del Noreste Argentino dio cuenta de que, por estos días, la actividad muestra una descripción del estado de situación con varias aristas. El documento lleva la firma del gerente ejecutivo de la entidad, Roberto Varela.

“La presente temporada se caracteriza por una alta producción de fruta que fue visible desde la primavera pasada. Desde allí, esta campaña se desarrolla en medio de una situación económica restrictiva que contrae la decisión de compra de los consumidores”, comenzaron planteando.

Por otra parte, la conformación histórica de la estructura productiva del citrus “ha considerado que la fruta que va a la fábrica siempre fue la última opción para el productor”, una realidad que “siempre marcó un límite a la producción de derivados en la industria y, por lo tanto, la capacidad de proceso de las plantas no creció”. “En las actuales circunstancias de sobre oferta de frutas se padece esa falta de capacidad más allá de otros efectos secundarios”, agregaron.

Por otro lado, las empresas exportadoras ven aumentar los costos de producción y de exportación con un dólar “cuasi fijo” para el ingreso de divisas y con los precios para las frutas que lo fija el mercado exterior: “Esto hace que nuestra fruta -indicaron- no sea competitiva en precio ya que se exportan una serie de impuestos imposibles de desglosar que elevan el costo de producción”. Este mismo problema también afecta a la fruta que se comercializa en el mercado interno, según consignaron.

A su vez, plantearon que “la reducción de oportunidades de exportación por los costos internos hace que la disponibilidad de transporte y contenedores refrigerados sea casi nula”. En esa línea, recordaron que hace 20 años “la fruta se enviaba directo a los puertos de nuestro mercado exterior”, mientras que en la actualidad “se detiene en puertos intermedios, lo que aumenta el tiempo de viaje para un producto que es perecedero y que por lo tanto agota parte de su vida útil en el viaje, cuando antes lo hacía en los anaqueles de dichos mercados”.

“Como si fuese poco este panorama, el clima no sido bueno en el comienzo de la campaña y aporta dificultades adicionales a nuestras frutas. Esta descripción de la situación implica que, las instituciones representativas del sector, tenemos el deber de analizar y trabajar sobre las circunstancias descriptas y proponer soluciones en el marco interno y externo de las asociaciones, manteniendo el diálogo que siempre es constructivo”, manifestaron.

Fuente: El Entre Ríos / CECNEA