Política

El semáforo del Senado Nacional: así votaron los entrerrianos De Angeli, Olalla y Kueider

Una de cal y una de arena para la Rosada. Porque el miércoles, en Diputados, el oficialismo celebró la impotencia opositora para rechazar el veto a la reforma previsional que contemplaba una mejora en las jubilaciones y la remisión de fondos adeudados a las cajas provinciales como la de Entre Ríos.

Revés para Milei
Entre jueves y viernes cambió el viento. Milei se encontró en el Senado con mayorías en la Cámara alta que buscaron equilibrar la balanza en un tiempo en el que prima la definición “libertaria” respecto de a qué se asignan los recursos del Estado y a qué no. “Soy minarquista”, se ha presentado el presidente. Desde esta perspectiva, el Estado solo se ocupa de gastar en Seguridad y Justicia. O en Inteligencia, con fondos a discreción.

El Senado, en dos votaciones, cuestionó de raíz este argumento. Por un lado, rechazó el DNU que asignó 100 mil millones de pesos a fondos reservados para la SIDE. Por el otro, convirtió en ley el proyecto impulsado por la oposición (el radicalismo fundamentalmente) para asignar financiamiento a las Universidades públicas para gastos de funcionamiento, presupuesto general y salarios.

El nuevo tiempo ha marcado la implosión de los distintos bloques. Es así que cada votación, en el Congreso, suele poner en juego la voluntad de un cúmulo de expresiones personales fundadas en pareceres ocasionales, negociaciones más o menos transparentes, convicciones profundas o no tanto.

Pasó en Diputados, el miércoles, cuando el cambio de voto de un puñado de radicales dejó firme el veto a la ley de mejora de las jubilaciones; sumado a otro conjunto ocasional de quienes sin dar fundamentos decidieron abstenerse; y con el aporte entrerriano que desequilibró la balanza: un diputado saliente (Pedro Galimberti) que ya no estuvo para acompañar la ley, una diputada entrante (Nancy Ballejos) que avaló el veto de Milei, y un ausente sin aviso (Francisco Morchio).

Votos entrerrianos al financiamiento de universidades

El financiamiento para las universidades públicas fue impulsado en Diputados, fundamentalmente por legisladores de la UCR, al calor del reclamo de las instituciones educativas jaqueadas por la falta de recursos y el deterioro de salarios. Tuvo media sanción con amplias mayorías y fue convertida en ley en la noche del jueves, en el Senado.

La norma (que está previsto que sea vetada) recompone el financiamiento y lo actualiza de manera bimensual por el índice de inflación. Se prevé además una mejora en salarios docentes y del personal administrativo y de servicios. Fue sancionada por 57 votos a favor, 10 en contra y una abstención.

Allí los entrerrianos votaron sin mandato de bloque. El senador del peronismo, Edgardo Kueider, acompañó la ley y compartió el criterio con su par del radicalismo, Stella Olalla que avaló el financiamiento para el sistema universitario nacional. El senador del PRO, Alfredo De Ángeli, votó en contra en línea con la postura defendida en el recinto por los libertarios.

Los votos para los fondos reservados a la SIDE
Extenso debate también se dio en el recinto respecto del DNU de Milei que asignó 100 mil millones de pesos, a ser manejados como fondos reservados, para la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE). Entre otros aspectos de la discusión, se planteó en el recinto el reclamo de que el gobierno de Milei y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, den cuenta de lo que se ha hecho con estos fondos. Por imperio del DNU rechazado ya se han gastado más de 80 mil millones.

Votó a favor del DNU de fondos para la SIDE el peronista Kueider, que había sido impulsado por el gobierno de Milei para presidir la Comisión Bicameral de Fiscalización de las Actividades de Inteligencia. La oposición terminó por imponer allí al radical Martín Lousteau, secundado por dos kirchneristas puros: Leopoldo Moreau y Oscar Parrilli.

De Angeli expresó su rechazo al DNU, pese a su cercanía con Bullrich que había solicitado una sesión secreta para dar explicaciones del destino de los fondos que pretendían seguir siendo reservados.

Olalla fijó sus prioridades respecto del gasto público. Así como votó los fondos para educación superior, rechazó el DNU de fondos para la SIDE. Eran las 2.20 de la madrugada.

Fuente: Luz Alcain para Página Política.