A partir de una investigación iniciada de oficio por la fiscal Julia Rivoira, buscando determinar “formas y circunstancias” en que dos personas perdieron la vida en un mismo lugar, fue detectado el funcionamiento de un geriátrico clandestino en calle Urquiza 181 de Concordia.
Una orden de allanamiento del Juzgado de Garantías -a cargo de Germán Dri- permitió ingresar a la residencia en la tarde del domingo y aprehender a una mujer de 36 y a un hombre de 29 años, por el presunto delito de “Abandono de persona”. Se trata de una enfermera domiciliada en ese mismo lugar, que se encontraba junto a su pareja y un hijo de un año de edad.
Encerrados bajo llave, en un lugar en el cual -aparentemente- pretendían que no fueran vistos durante el procedimiento, se hallaban otros dos internos de este geriátrico clandestino: una mujer de 74 y un hombre de 81 años, a los cuales la enfermera manifestó “estar cuidando”. Ambos adultos mayores fueron examinados por un médico policial y derivados al Hospital Felipe Heras.
Del lugar, fueron secuestrados varios elementos de interés para la causa, como dos teléfonos celulares y documentación relacionada con las personas fallecidas. Al realizar una constatación en sus instalaciones, se dio con (03) sillas de ruedas, (01) baño ortopédico, (01) esterilizador, (04) camas de una plaza con colchón, (03) bolsones de pañales para adultos, (04) colchones antiescaras y (06) envases de suero.
Además, se encontró un perro con signos de desnutrición encerrado en un pequeño patio, que fue entregado a la ONG “Conciencia Animal”.
Fuente: El Entre Ríos