En las últimas horas, el río Paraná descendió y llegó al fin de semana apenas por encima del metro de altura, por lo que se retiró el boyado del balneario municipal de la capital provincial.
La medida se argumenta en que “ante la bajante de las aguas, el boyado debería moverse muy cerca del canal, con todos los riesgos que eso significa: lo rápido que corren las aguas, acompañado de una profundidad que nada tiene que ver con la de la costa”.
Una vez que las aguas muestren niveles más altos, la intención de la Municipalidad de Paraná es que nuevamente se habiliten los balnearios y sus respectivas playas.
Entretanto, se colocó la cartelería correspondiente con el objetivo de resguardar a los bañistas. En este sentido, se confeccionaron anuncios (ubicados en el Thompson, el Municipal y Bajada Grande) advirtiendo que las aguas no están habilitadas para ingresar.
Por otra parte, desde la municipalidad solicitan a las personas respetar las indicaciones de los guardavidas apostados en cada uno de los balnearios, con el propósito de no correr riesgos y evitar complicaciones.
Además, invitaron a la gente a acercarse a las playas para disfrutar de los otros atractivos con que cuentan estos espacios.
Fuente: El Entre Ríos / Municipalidad de Paraná