Política

"¿Nos toman por tontos?": Villarruel cuestionó acuerdo que la canciller Mondino cerró con Gran Bretaña por Malvinas

La vicepresidenta Victoria Villarruel se opuso al nuevo acuerdo que la canciller, Diana Mondino, cerró con su par de Gran Bretaña, David Lammy, por las islas Malvinas. Con este tratado se busca renovar un vuelo desde San Pablo hasta el archipiélago, con escala en la provincia de Córdoba, y reanudar las visitas de los familiares de caídos en la guerra de 1982 al cementerio de Darwin.

“La propuesta de acuerdo anunciada con el Reino Unido es contraria a los intereses de nuestra Nación. Esta propone entregar apoyo logístico continental a la ocupación y permitir de hecho que puedan seguir depredando nuestros mares, ¿Para qué? ¿Para ir a visitar nuestras islas con visa y pasaporte? ¿Nos toman por tontos? Ellos obtienen ventajas materiales, concretas e inmediatas, mientras que a nosotros nos ofrecen migajas como consuelo emotivo y debilitan nuestra posibilidad de negociación”, escribió la titular del Senado en X.

En otro fragmento de su tuit, Villarruel sostuvo que “resulta insólito que mientras los EE.UU. nos ofrecen buques guardacostas para proteger nuestro mar argentino del pillaje extracontinental, nosotros propongamos cooperar con la potencia que usurpa nuestro territorio”.

Por último, la vicepresidenta dijo: “Estas no son palabras contra nuestro Gobierno, sin embargo, es inevitable expedirme sobre este acuerdo, ya que es un tema que toca cada fibra de mi identidad y pone en juego los intereses permanentes de nuestra gran Nación. Porque somos amigos de todos, pero primero de la Patria”.

El acuerdo que Villarruel rechazó esta viernes se materializó durante el viaje de Mondino a la ciudad de Nueva York, en el marco de la Asamblea General de la ONU, donde la canciller se reunió con Lammy. Tras el encuentro, desde la Cancillería emitieron un comunicado en el que expusieron los principales puntos acordados.

“Las partes han acordado retomar las negociaciones tendientes a finalizar la tercera fase del Plan Proyecto Humanitario conjuntamente con la Cruz Roja Internacional, así como también organizar un viaje de familiares de caídos a las Islas antes de fin de 2024, para que puedan visitar las tumbas de los soldados que allí descansan”, se remarcó.

“También se estableció la necesidad de avanzar con medidas concretas en materia de conservación de pesquerías y en favor de una mejor conectividad, en virtud de los arreglos alcanzados en 2018, incluida la reanudación del vuelo semanal de San Pablo a las Islas, que realizaba una escala mensual en Córdoba”, agregó el Palacio San Martín. “La canciller Mondino y el secretario Lammy acogieron con beneplácito las medidas que están siendo adoptadas para alcanzar una mejor relación bilateral y acordaron hablar nuevamente en una oportunidad futura”, concluyó el comunicado oficial.

Las críticas de Villarruel, cuyo padre, Eduardo, fue excombatiente de Malvinas, se enmarcan dentro de su propia historia personal. La vicepresidenta demostró en más de una oportunidad que la cuestión forma parte de su agenda. Durante el desfile por el 9 de Julio se mostró con los ojos llorosos cuando desfilaban los veteranos de la guerra.

Incluso, un grupo de 1400 soldados que durante la guerra de Malvinas fueron movilizados en 1982 a las seis bases militares desplegadas en la costa atlántica, como integrantes de la Fuerza Aérea Sur, llevaron a mediados de julio ante Villarruel su reclamo para ser reconocidos como veteranos de guerra.

Sin embargo, no es la primera vez que la presidenta de la Cámara de Senadores se desmarca del oficialismo. Días atrás, el Gobierno se despegó de la idea que anunció Villarruel de impulsar la reapertura de las causas contra los miembros de las organizaciones guerrilleras de los 70. Desde Casa Rosada sostuvieron que esa era una “agenda” de la titular del Senado, según pudo saber LA NACION.

Incluso, el vocero Manuel Adorni llegó a decir: “Todos sabemos de la lucha que Villarruel lleva desde hace años para que la Justicia juzgue a todas las partes (en relación con los 70). Obviamente, es un tema de la agenda de Villarruel porque es su bandera y la conocimos en esta lucha. Es un tema que hoy no está agenda del Presidente”.

Además, dos meses atrás la vicepresidenta provocó malestar dentro del Ejecutivo luego de publicar un mensaje desafiante contra Francia tras la polémica alrededor de un vivo de Instagram del volante argentino Enzo Fernández, donde jugadores de la selección argentina entonaron una canción con connotaciones racistas tras ganar la Copa América 2024. En aquella oportunidad el episodio escaló al punto que la propia secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, optó por reunirse con el embajador de Francia en Buenos Aires, Romain Nadal, relegando a la titular del Senado.

Aquel episodio volvió a exhibir la tirante relación política que mantienen Villarruel y la hermana del Presidente. En efecto, desde la Casa Rosada se jactaron entonces de que la cita con el diplomático francés tuvo como único objetivo “desactivar el conflicto que había generó la vicepresidenta” tras sus recientes declaraciones sobre la potencia europea. La reunión no fue bien recibida por el entorno de la titular del Senado. Y hubo quienes reclamaron: “Cuando Diana Mondino dijo que todos los chinos eran iguales, Karina no fue a la embajada de China”.

Fuente: La Nación