“Políticas para la República” prefiere el modelo santafesino de boleta única de papel (BUP). Estarían dispuestos a aceptar le modelo de Córdoba, pero si quitan la opción de voto por lista completa que permite el arrastre de candidatos a gobernador sobre cargos locales.
El partido Políticas para la República, que tiene presencia en varias ciudades de Entre Ríos, como Paraná (llegó a tener dos concejales), Crespo, Diamante y que está en búsqueda del reconocimiento provincial, presentó en la Cámara de Diputados un documento con una serie de propuestas de modificaciones a los artículos del proyecto de reforma política impulsado por el gobernador Rogelio Frigerio.
No al efecto arrastre
La objeción central pasa por el modelo de BUP. Prefieren el de Santa Fe, donde se evita por completo el efecto arrastre entre las distintas categorías de cargo. En cambio, la BUP que impulsa Frigerio (similar a la de Córdoba y Mendoza) permite, con la opción del voto por lista completa, que el gobernador arrastre al intendente. Y los partidos vecinalistas son fuerzas locales, sin gobernador.Pero la fuerza vecinal de Paraná advirtió otros problemas en el proyecto oficial. Armando Sánchez, presidente de PR en Paraná y a nivel provincial, se mostró preocupado por algunos puntos del proyecto que “quizás puedan tener efectos negativos en cuanto a igualdad, representatividad política y democracia”, como “reformas drásticas a la ley de partidos políticos, o plazo de convocatoria de elecciones, o temas sobre la veda de los actos de gobierno, o sobre la Boleta Única de Papel”.
Restricciones
Para Sánchez, la reforma de la ley de partidos políticos que plantea el proyecto del Poder Ejecutivo podría volver “restrictivo, desigual y hasta proscriptivo el proceso democrático de los partidos políticos provinciales, vecinalistas, municipales y comunales, e incluso podría hacer caducar partidos que hoy están activos”.En concreto, señalan que se cambian “drásticamente” los requisitos para la obtención y mantenimiento de la personería jurídico-política de los partidos políticos, haciéndolos “muy restrictivos, mucho más difíciles de cumplir y en algunos casos los vuelve impracticables”.
Por ejemplo, para el reconocimiento provisorio “pasa de exigir 500 adhesiones a más de 4000 adhesiones para iniciar el trámite”. Lo mismo para las afiliaciones.
Fuente: El Entre Ríos.