Gabriel Martínez nació hace 35 años en Diamante, ingresó al Ejército Argentino a los 15 años, es Sargento Primero y está destinado en el Comando de la II Brigada Blindada de Paraná de las Fuerzas Armadas. Este domingo, luego de una preparación final y una cuarentena sin precedentes y que pudo superarse con éxito, salió desde Ezeiza en el primer vuelo directo de la Fuerza de Tarea Argentina 56, con destino a la isla de Chipre, donde desarrollará su tercera misión de paz.
En el día que se recordó el paso a la inmortalidad del General San Martín, la FTA 56 dejó el Centro Argentino de Entrenamiento Conjunto para Operaciones de Paz (Caecopaz) para viajar a reemplazar a la delegación de la FTA 55 que el fin de semana estará volviendo a la Argentina, después de seis meses de servicio en la isla del Mediterráneo.
Martínez destacó que esta será su tercera misión de paz y que, debido a la pandemia, la instrucción fue diferente y con muchos más recaudos, para poder ingresar a Chipre libres de Covid-19. Sin embargo, allí los espera otra cuarentena en un lugar que organizó Naciones Unidas, donde permanecerán aislados y después de 14 días empezarán con la misión.
Martínez se instaló en Campo de Mayo el pasado 3 de agosto para cumplir con la etapa final de preparación. “Las Fuerzas Armadas Argentinas cuentan con un esquema de instrucción previo al despliegue a una misión de paz de tres etapas. La primera, denominada etapa unidad, la segunda llamada etapa intermedia y la final, que se ejecuta en las instalaciones del Caecopaz. Este año, dado el contexto actual, se adaptaron estas dos primeras etapas al modo virtual, haciendo uso por ejemplo de herramientas como Classroom, bajo la coordinación del Caecopaz, que cuenta con un plantel de experimentados instructores nacionales, como así también de otros países y fuerzas de seguridad. Finalmente, la última etapa la transitamos bajo estrictos controles de bioseguridad. En este sentido, el centro no solamente adecuó sus instalaciones, sino también se aplicaron protocolos (barbijos, distanciamiento, habitaciones individuales), además con nosotros también hicieron la cuarentena el personal de instructores y demás personal de apoyo para reducir el riesgo de contagio al mínimo posible. De esta manera, la preparación predespliegue se llevó a cabo de forma segura, inclusive se nos efectuó un primer hisopado el primer día y el jueves por la noche se efectuó un último test”, explicó.
La Fuerza de Tarea Argentina 56 está compuesta aproximadamente por 200 personas de las tres fuerzas, es decir, Ejército, Armada y Fuerza Aérea, además de personal de países vecinos como Brasil.
Para Martínez ésta será la tercera misión de paz que integrará. “La primera fue en la República de Haití, en el ámbito de la Misión de Estabilización de Naciones Unidas en Haití-Minustah. Allí, me desempeñé en el Batallón Argentino HAITÍ XI, cuyos integrantes fuimos testigos presenciales del terremoto que azoto al país caribeño el 12 de enero de 2010. Luego, en 2014, me desplegué a la isla de Chipre formando parte de la Fuerza de Tarea Argentina 43. Nuestro país tiene una larga tradición de aporte de tropas a misiones de paz en el mundo desde los inicios de las Naciones Unidas, formando parte de UNFICYP, Misión de Naciones Unidas para Chipre desde el año 1993”, detalló.
Una historia fascinante
Al hablar de Chipre, Martínez no duda en repasar la historia de la isla ubicada en un lugar geográfico estratégico, que conoce por estudioso y también por haberla recorrido en su primera incursión.“Es cuna de las primeras civilizaciones entre ellos fenicios y egipcios que se la disputaron en la antigüedad. El gran Alejandro Magno en la proyección de su vasto imperio macedónico es el antecedente de la actual etnia griega. Años más tarde, esta isla fue testigo del paso de las Cruzadas, allí su máximo referente Ricardo Corazón de León selló su alianza con Berenguela de Navarra. También fue testigo de la caída del imperio Bizantino por parte de los Otomanos, allí podríamos ubicar las primeras personas de etnia turcas en la isla. En el marco de las guerras ruso-urcas los otomanos cedieron la isla a Inglaterra como protectorado. Hacia la Primera Guerra Mundial la isla es proclamada colonia por Inglaterra, situación que duró hasta finales de la Segunda Guerra Mundial", detalló.
Continuó: "Durante los años 50, la isla logró su independencia, con la composición de un gobierno compartido entre grecoschipriotas y turcoschipriotas, cuya constitución establecía un gobierno presidido por un presidente de la etnia griega y un vicepresidente turco. Hacia al año 1960, esta relación se deterioró generando una inestabilidad social entre estas dos partes. Así, luego de algunos hechos de sangre como la Navidad del 63, en el año 1964 Naciones Unidas –tras el pedido del presidente Makarios–, creó una misión de paz para tratar de finalizar con el conflicto. Esta situación duró poco, cuando grupos nacionalista adeptos a la Enosis –un movimiento griego– instaba entre otras cosas al anexo de todas las islas griegas a Grecia. Efectuó un golpe de estado el 15 de julio de 1974. Ante esta situación, Turquía invadió la isla en lo que se llamó operación Atila.
"En este contexto, Naciones Unidas trazó un línea de cese de fuego, llamada Bafer Zone, que es la que hoy custodia La Fuerza de las Naciones Unidas para el Mantenimiento de la Paz en Chipre (en inglés las siglas UNFICYP). Esta línea se encuentra dividida en tres partes denominadas sectores, que cuentan con puestos de observaciones fijos y móviles. Argentina tiene bajo su responsabilidad el Sector 1, ubicado hacia la parte oeste de la isla que comprende dos ubicaciones: el Campo San Martín, cerca de la localidad de Skouriotissa, y el Campo Roca, próximo a Xeros”, especificó.
Con la mitad de la vida dentro del Ejército, Gabriel Martínez aseguró que eligió ser militar por curiosidad. Sin embargo, la carrera le abrió infinitas posibilidades de estudio, viajes, además de formarlo como persona. “Elegí ser militar cuando tenía 15 años, es una carrera llena de oportunidades, donde uno aprende y refuerza valores, además del privilegio que es pertenecer a una fuerza como es el Ejército Argentino, una de las instituciones que ayudó a fundar la patria. Es una forma de servir desde un lugar que te permite realizar una carrera con proyección y con vivencias únicas, como las que se están realizando en el marco de la Operación Belgrano en todo el país, por medio de diversas tareas y actividades en apoyo a la comunidad debido a la situación que atravesamos por el virus Covid-19”.
También se tomó un tiempo para invitar a los jóvenes a conocer: “Si después no es lo que esperaban no pasa nada, fallan hasta los test vocacionales. Pero si sienten curiosidad no lo duden, conozcan la Fuerza y sepan que hay muchas formas de servir a la Patria y una es portando uniforme”.
Unos van, otros vuelven
El próximo fin de semana estará volviendo la delegación correspondiente a la Fuerza de Tarea N°55 que viajó a Chipre en marzo de este año. En ese cuerpo de paz se encuentra la entrerriana Josefina Beckman, sargento a cargo de la División VI-Relaciones de Ejército del Comando de la II Brigada Blindada de Paraná. Para la paranaense fue la segunda experiencia en la isla que le permitió crecer en su carrera militar.Beckman fue la única entrerriana dentro de las 14 mujeres que formaron parte de este contingente integrado por 224 Cascos Azules que cumplieron seis meses de trabajo en la isla del Mediterráneo.
Fuente: Diario Uno