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Esta es la historia de tres músicos jóvenes que salieron de Gualeguaychú a buscar conquistar el mundo, como lo hicieron anteriormente sus hermanos mayores y sus primos; formaron un power trío acústico llamado Valbé: grabaron dos discos -Valbé (2009) y 7 Paisajes (2014)- y terminaron invitados por el ex baterista de Sepultura a grabar en sus estudios FamilyMob de San Pablo.

El resultado es Terser, un disco, que es una de las sorpresas musicales del año en la escena local. El trío compuesto por Mariana Recalde en voz y guitarras, Damián Helmer en bajo y Cristhian Faiad en batería, traduce en diez canciones esa galaxia contemporánea litoraleña que combina las partículas del rock, el funk, el pop y el folklore, a partir de una estructura de acordes experimentales, que funcionan como canciones fractales de artistas como Lenine, Fernando Cabrera o el Negro Aguirre.

Fue un largo camino desde que el trío emigró de su provincia hasta alcanzar este grado de originalidad en su presente musical con Terser, que presentarán en la sala Caras y Caretas. "En cualquier ciudad o pueblo del interior, cuando terminás la secundaria te vas a buscar otros horizontes. Entonces, lo que hacen todos los jóvenes es buscar otras oportunidades y generalmente vienen a Buenos Aires. Ahora eso cambió, pero antes era así. Vinimos separados. Primero vino el baterista. Después el bajista. Cuando llegué yo, formamos la banda. Hace diez años que vivimos acá", cuenta la entrerriana Noelia Recalde, autora de las músicas y letras de Valbé.
Trío Valbé
El historial cancionero de Valbé se fue amasando entre su origen local, el nuevo pulso urbano que absorbieron de Buenos Aires y todas las influencias musicales que fueron descubriendo en el camino. Los tres funcionan como la perfecta alquimia explosiva de ese producto cultural de Gualeguaychú, donde el pulso del carnaval es una constante y el horizonte del río permite ver del otro lado la costa uruguaya.

"Gualeguaychú está en frente de Uruguay y somos fanáticos de toda la cultura uruguaya y del Brasil. Si vamos a la profundidad de la música crecí con el sonido de una batucada que ensayaba al lado de mi casa. La cuestión rítmica está súper presente. Estamos bien embebidos de ese color rítmico y la parte folklórica litoraleña que se escuchaba en la radio. Eso es lo más normal. Después uno busca su sonido, pero la esencia permanece. En los tres discos hay tintes litoraleños y tintes rockeros. Está el litoral y está la ciudad, que nos atravesó en los últimos años".

-También hay referencias a artistas como Lenine y la música negra

-Hace unos años fui muy fanática de Lenine. Me dijeron que tocaba la guitarra medio parecido a él, sin conocerlo. Estudié portugués y pude entender sus letras. Me identifiqué con su mensaje y eso está presente. El tema del beat y el groove esta fortalecido desde la base. Ellos son fanáticos del funk. Los tres escuchamos de todo: Rada, los Beatles y Prince. De todo lo que se te ocurra, algo vamos a conocer.

-En las letras, en cambio, hay una mirada más existencialista y contemplativa, como las del entrerriano Negro Aguirre.

-Busco un mensaje que sea profundo. Reflexionar dónde estamos parados y qué podemos hacer para mejorar. Estoy por cumplir treinta y esa visión existencialista debe ser por la edad. Al Negro Aguirre lo vi miles de veces y seguro me habrá influenciado pero me gusta la idea que esa influencia esté abrazada por mi esencia y no al revés. Asumo el compromiso que las canciones movilicen alguna fibra mínima, aunque sea algo de fantasía, unión social o inspiración. Los tres consideramos que la música tiene que ver en la formación de las personalidades y nos lo tomamos en serio.

-¿Cuál es el concepto de Terser?

-En en este disco hay un quiebre en nuestra estética. Hay una cosa entre galáctica y futurista, donde jugamos a encarnar unos personajes que son los guardianes de la tierra, los minerales y el espacio. Sonoramente también apareció un nuevo concepto. El proceso fue a la inversa de otras veces. Se trabajaron primero las bases desde una batería digital para lograr otras estructuras. Haber grabado en Brasil en un estudio muy rockero y a la madrugada le dio, también, otra atmósfera y otro sonido al trío.

-¿Cómo está la escena musical de Gualeguaychú actualmente?

-Si me baso sólo en lo que hay en Gualeguaychú tenés cosas espectaculares. No coincido con la idea que hay un receso en la escena musical. Hay mucha gente creando. En Entre Ríos hay mucho talento oculto y no llega a la masividad. Todos queremos a Soda, Charly y Spinetta, pero eso no significa que no haya nuevas cosas y nuevas músicas para descubrir.
Fuente: La Nación

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