De acuerdo a los primeros datos, el vehículo fue arrastrado unos 300 metros hasta calle El Paracao, en la zona de las vías y Villa 351.
El capot del auto puede divisarse bajo el puente. Las intensas tareas para rescatar a la conductora se concentran sobre calles El Paracao y Rosario Vera Peñaloza, entre las avenidas Ramírez y Las Américas.
"No están dadas las condiciones de seguridad para que los buzos tácticos desciendan debajo del puente sobre el arroyo Antoñico", confirmó el subjefe de Bomberos Voluntarios, Hernán Méndez.
Difunden datos para encontrar la joven
Se trata de Fiorella Furlán, de 23 años, quien a bordo de un Renault Clío cayó desde un puente al ser arrastrado por la correntada.Fueron sus familiares quienes a través de las redes sociales difundieron el pedido de datos sobre paradero."Estamos desesperados! Es mi hermana Fiorella. Su auto cayó a un arroyo hace horas y no sabemos nada de ella. No la encuentran. Por favor compartan su foto por si alguien sabe algo", posteó su hermana, Flavia.
"No podemos confirmar que la conductora está en el auto o si alcanzó a salir", acotó al respecto el subjefe de Bomberos Voluntarios, Hernán Méndez.
Las palabras de un testigo del hecho
Un testigo, Alberto, contó que la joven conductora, desde el interior del auto siniestrado, alcanzó a dar aviso a alguien con su teléfono celular. "Llamé al 911 y llegaron enseguida pero no pude hacer nada más", se lamentó."Yo corrí a la par del auto cuando iba sobre el lecho del arroyo", rememoró. El testigo del accidente contó que él alcanzó a ver a la conductora cuando, desde Avenida Ramírez, dobló por calla Manuel Gálvez pese a la intensa cantidad de agua sobre el pavimento.
"Le hice señas para que no doblara, pero ya era tarde. La correntada arrastró al auto y lo tiró del otro lado del guardarrail", recordó el testigo.
"El agua levantó al auto y lo hizo flotar sobre el lecho del arroyo". De acuerdo a lo que señaló, el vehículo "flotó" sobre el lecho del arroyo Antoñico y continuó "como si fuera marcha atrás".
El testigo aseguró que corrió a la par del auto, "hasta que se me perdió de vista".
