“Nos hemos encontrado con un brote bastante importante en varias zonas de la ciudad y la única solución que tenemos es hacer un tratamiento sintomático, algo paliativo porque el moquillo puede quedar solo en una afección respiratoria, o pasar a un cuadro nervioso que queda de por vida en el animal y muchas veces no se salva”, confirmó la funcionaria.
El moquillo es una enfermedad que se puede combatir con la vacuna quíntuple, “de la que debe hacerse cargo cada tenedor responsable de animal”, apuntó Mérida, a la vez que comentó que la municipalidad brinda atención primaria: “Otorga la vacuna antirrábica y antiparasitarios, pero la quíntuple es algo que se tiene que hacer responsable cada tutor”.
“Si están vacunados, siempre el riesgo disminuye exponencialmente, pero ninguna vacuna es garantía al 100% ya que también depende de muchos factores, como qué tan infectado está el ambiente en el que se encuentra el animal”, dejó en claro la especialista, “pero hasta ahora los casos que hemos registrado son de mascotas que no estaban vacunadas y no tuvimos nunca, por ahora, un caso de un animal inoculado que se haya contagiado igual”.
Sobre la posibilidad de llevar una nueva mascota al hogar luego del fallecimiento por moquillo del anterior, la funcionaria aseguró que “hay que dejar pasar un tiempo prudencial para que el virus no esté más en el ambiente, porque muchas veces ocurre que se muere el animal y a los dos o tres días traen otro, que por lo general son cachorros que no tienen ningún tipo de inmunización, y lo más probable es que se contagie”.
“Siempre hablamos de la responsabilidad que significa tener un animal en la casa, que esté vacunado, estar seguros de que vamos a poder contar con los recursos básicos necesarios para darle una buena calidad de vida y una buena atención a la hora de acudir a un veterinario, que muchas veces ocurre”, instó.