Conducido por la jueza Alicia Vivian, el proceso tiene como imputados a Fabián Carlés, Julio Herrera, Héctor Bernigaud y Mario Carles, quienes enfrentan un pedido de pena de seis meses a tres años de prisión, basada en el artículo 181º del Código Penal. La querella es representada por Amelia Angerosa y su cliente es Gustavo Albano Robles, víctima de la supuesta usurpación.
Uno de los imputados por este delito, Fabián Carlés, anticipó que se podría pedir una probation. “Vamos a presentar todas las pruebas, brindar las testimoniales, presentar las fotos y testamentos de escrituras que figuran a nombre de Teodoro Carlés”, indicó, anticipando que “está previsto que declaren los policías y testigos de la parte acusadora, que es la familia Robles”.
“Estamos dialogando con mis tres abogados defensores porque hay una amplia posibilidad de presentar un probation: eso es la suspensión del juicio a prueba, un beneficio con el que cuenta el imputado para delitos con penas menores a tres años. Vamos a ver cómo podemos plantearlo”, señaló Carlés.
“El replanteo de esa condición sería porque, en tiempo pasado, tuvimos una defensa técnica bastante ineficaz que se salteó ciertos pasos legales del proceso penal”, admitió el imputado.
El inmueble en discusión es un establecimiento de 125 hectáreas que los cinco hermanos Robles, Gustavo, Néstor, Ana María, Blanca y Andrés heredaron y dividieron en cinco parcelas: su padre lo habría comprado a Teodoro Carlés y ahora sus familiares lo reclaman como propio.