Paoli explicó que “ante el peligro de que la mujer pudiera ser intimidada es que no solo se pidió la detención sino también el allanamiento”. Contó que “la propia víctima y la familia del denunciado habían dicho que tenía armas y, ante la posibilidad de que la mujer fuera intimidada o se ejerciera violencia contra ella, antes de que pueda declarar, la fiscalía solicitó y se hizo lugar a un allanamiento y se secuestraron un montón de armas que se están identificando y también se procedió a la detención de esta persona que es abogado”. “Trabaja en el foro local yo la verdad no lo conozco, no sé dónde trabaja”, agregó el fiscal de género.
Francisco Amadio tenía en su domicilio dos pistola calibre 9 mm -semiautomáticas- marca Bersa, cinco cargadores de 9 mm, 48 cartuchos 9 mm, tres carabinas calibre .22 mm, 100 cartuchos sin percutir calibre 22mm.
Según lo publicado por el diario El Sol, el abogado tendría Licencia de Legítimo usuario para algunas de las armas pero no todas. Igualmente fueron secuestradas porque el supuesto delito que se investigaba es violencia de género.
Paoli precisó que habrá que “identificar bien las armas porque cada arma tiene una nomenclatura y se identifica, si son de guerra. No necesariamente se le va a imputar eso, de momento se está estudiando la situación”, aclaró.
“Lo que sí hay –agregó- es una posible violencia de género que es lo que nos importa a nosotros”. “En el caso de las armas aprovechamos la circunstancia también de uniformar las investigaciones”, dijo Paoli, quien confirmó que “el abogado está detenido, nosotros tenemos ahora el tiempo para tomar la declaración e imputarle los hechos y después resolveremos la situación”.
