Los hackeos de celulares persisten a ambos lados del río Uruguay. Los que ejecutan la maniobra van mutando el “cuento del tío” e incluso parecen perfeccionarlo.
Un sanducero contó la situación que vivió al ser víctima del robo de su cuenta de WhatsApp con el fin de apoderarse de sus contactos y pedirles dinero.
“En la tardecita del viernes me llamaron por WhatsApp –contó le joven- como si fueran de servicio técnico. Y me agarraron a esa hora que había laburado todo el día y cansado, y me dijeron que habían accedido a mi cuenta desde otro lado, de Maldonado o Canelones. Para cerrarla te tengo que pedir un número que aparece en pantalla me pidieron. Le dije cómo sabía que eran de Soporte Técnico, dudando un poco porque sé cómo se manejan. Entonces me indicó que tenía que entrar al mensaje de ellos para ver que se trataba de una cuenta verificada, lo cual es verdad, aparece así. Entonces confié y les pasé el número que me pedían. Después de eso me entraron al WhatsApp, vi que se me cerró la cuenta, y ellos enseguida le escribieron a mi madre que precisaban plata y ella estuvo a punto de transferirles. No llegó a hacerlo porque la llamé al número fijo de la casa y le dije que era una estafa. Enseguida hicimos un grupo con mis familiares para advertirles que no era yo y pudimos absorber el golpe”.
El joven dijo que felizmente no pasó nada grave, “excepto que se ve que desde el celular pudieron entrar a mi cuenta del BBVA que me aparece como bloqueada. Como justo ahí no tenía nada de plata porque no había cobrado, no me pudieron robar nada por suerte. Pero tengo que ir al banco el lunes a hablar, a hacerme una cuenta nueva”.
En tanto, indicó su preocupación porque este tipo de estafas puedan hacerse a otras personas. “Me puse a pensar en qué pasa si se lo hacen a una persona mayor que no entiende nada de tecnología, la angustia que genera, capaz hasta le da un ataque al corazón”, precisó.
Si se es víctima de este engaño hay que avisar a todos los contactos que estén prevenidos ante posibles mensajes fraudulentos que puedan recibir desde el número de teléfono robado. Nunca hay que compartir ningún código que tengamos o nos llegue a WhatsApp con un desconocido; y siempre hay que tener activo el doble factor de autenticación, que agrega una clave secreta al sistema. También conviene ponerse en contacto con WhatsApp a través del correo electrónico que la plataforma ofrece (support@whatsapp.com) para explicarles lo sucedido. Asimismo, los afectados deben reportar el número de teléfono que les contactó para que la propia plataforma actúe y tome medidas, recopilando todas las evidencias posibles para demostrar haber sido víctima de un fraude.
Fuente: El Telégrafo