Del total de casos relevados en los medios gráficos y digitales del país, se señaló que 191 correspondieron a homicidios de mujeres, mientras que hubo 21 femicidios vinculados de mujeres, hombres, niñas y niños, y cuatro de personas trans, es decir travesticidios.
El 78% fueron abusadas
De las 191 mujeres asesinadas, 14 eran niñas y adolescentes menores de 15 años, y el 78% de ellas fue abusada, mientras que el 42% estuvo desaparecida por varios días. Asimismo, se informó que el 71% de esos femicidios fue cometido por miembros de la familia.“A pesar del sostenimiento de la violencia machista, en nuestro país, el Gobierno Nacional sólo destinará en el Presupuesto 2019 la suma de 234,3 millones de pesos al Instituto Nacional de las Mujeres (INAM), organismo encargado de La aplicación de la Ley 26.485, es decir, sólo $ 11,36 por mujer”, comentó Betiana Cabrera Fasolis del colectivo que realizó el informe. Y agregó: “Dicho presupuesto, con la inflación proyectada, implica una retracción del 18% con respecto al asignado en 2018”.
Las edades de las víctimas
Entre otros de los datos que se dieron a conocer en el informe, se detalló que el 44% de las víctimas tenía entre 21 y 40 años al momento de ser asesinada; el 11% tenía entre 0 y 15 años; y el 10% entre 16 y 20 años.En cuanto a las armas y la modalidad con la que se cometieron los crímenes, se pudo saber que el 28% fue asesinada con arma blanca, el 23,5% con arma de fuego, el 19% a golpes, el 17% por asfixia, y el 6,5% fue quemada. Del trabajo realizado por el Colectivo de mujeres se desprende que el 53% de los agresores tiene entre 19 y 40 años, mientras que el 22% entre 41 y 60 años.
Además, el 22% de los agresores se suicidó luego de cometer el femicidio, el 7% pertenece a una fuerza de seguridad y el 6% se encuentra prófugo.
Entre los meses que se analizaron los femicidios ocurridos en el país se determinó que el 67% de los casos ocurrieron en la vivienda de la víctima, mientras que el 11% fue en la vía pública y el 6% en un descampado. Del total de las mujeres asesinadas, el 45% tenía hijos, por lo que un total de 220 niños y adolescentes perdió a sus madres.