Desde el sur argentino, un hermano de este trabajador de la fruta, Miguel González, explicó: “Cualquier ayuda nos viene bien porque estamos acá ahora. Nos dieron una mano en la comisaría, pero estamos en una plaza de la localidad de Cordero”.
Durante la tarde del jueves, estuvieron en el lugar junto a los bomberos voluntarios locales. “Lo andan buscando, pero estaba corriendo mucho el río y hay muchas enredaderas, por lo que dicen que podría estar sumergido”, reportó Miguel. “Ellos estaban trabajando en Cordero, en Río Negro, y del otro lado del río sería Neuquén”, puntualizó este familiar, que confirmó que Cristian y su padre formaron parte de los mil trabajadores que salieron desde Concordia hacia el sur el pasado 9 de enero.
Sin embargo, el supuesto empleador que los esperaba, relacionado a la cosecha de la pera, “los tenía tirados en una pieza, que ni los perros viven, sin ventanas ni puertas, nada, donde los comían los mosquitos”, denunció el hermano.
Asimismo, ratificó la versión acerca de que “ellos cruzaron el río porque iban a pedir trabajo al otro lado para irse de ahí porque no estaban ganando nada y no les daban ni plata para comprar comestibles”.