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El Ministerio de Salud de Entre Ríos rechazó un recurso de revocatoria que presentó el médico Juan Andrés Arin, quien ocupa un cargo de profesional asistente en el hospital San Benjamín de Colón, contra la decisión del Poder Ejecutivo Provincial de abrir un sumario administrativo “por encontrarse su conducta presuntamente incursa en la causal de cesantía”, según el decreto Nº 1436, que firmó el ministro de Salud, Guillermo Grieve, el pasado 13 de junio último.

La conducta del médico quedó envuelta en dudas luego de que se dictara el decreto Nº 4731, el 14 de diciembre de 2023, una medida que según sostiene Salud ahora “no constituye un acto sancionatorio, dado que no ha adoptado medida disciplinaria alguna en contra el recurrente, sino que dispuso la instrucción de un procedimiento sumarial ante la presunta comisión de una falta”. En este sentido, se señala que durante el sumario administrativo iniciado “oportunamente se abrirá la causa a prueba, a fin de constatar las circunstancias por las cuales se dispusieron la instrucción sumarial y determinar si corresponde o no la aplicación de una sanción administrativa”.

En ese trámite, planteó el Estado, el médico Arin “podrá ejercer debidamente su derecho de defensa, con asistencia técnica de un defensor letrado, pudiendo presentar los descargos e impugnaciones que considere necesarios para la defensa de sus derechos a fin de esclarecer la situación denunciada”.

¿Por qué lo investigan al médico? El hecho, en verdad, ocurrió en 2017. Y estuvieron bajo investigación dos médicos, uno de San José, otro de Colón. La persecución administrativa solo se centró en el profesional de Colón, por cuanto el paso del tiempo derivó en que el médico de San José se acogiera al beneficio de la jubilación y, así, la imposibilitad del Estado de poder aplicar sanción alguna.
La historia del caso está contenida, precisamente, en el decreto Nº 4731.
Entre una derivación y otra
La vida de un bebé con 28 días quedó entre paréntesis un día de mayo de 2017.

Sus padres lo llevaron al consultorio de la pediatra en su ciudad, San José, y ésta le diagnostica apnea respiratoria y los urge a llevarlo a la guardia del hospital San José.

Eso hicieron su mamá y su papá: acudieron rápido al nosocomio y en la guardia ocurrió un sinsentido que derivó en una denuncia penal y en la decisión administrativa del Ministerio de Salud de investigar la conducta de los dos médicos que intervinieron.

En 2019, Salud dispuso una información sumaria en el ámbito de los hospitales San José, de San José, y San Benjamín, de Colón, “a los efectos de investigar y determinar la realidad fáctica de los hechos, como así también deslindar la responsabilidad de los agentes del Estado en torno a la falta de atención y/o derivación rápida y oportuna del paciente I.F., un neonato de 28 días de vida”.

La disposición legal del Estado dice que “ha quedado acreditada la falta de debida atención y derivación oportuna del paciente por parte de los médicos Barreto y Arin, hacia un centro asistencial de mayor complejidad como lo ameritaba la urgencia de la situación en función del cuadro que presentaba el menor y atento a que su médica pediátrica había solicitado desde un primer momento la misma”.

Una presentación del papá del bebé refiere: “Que en fecha 16 de mayo (año 2017) concurrieron con su bebé recién nacido de unos 28 días al consultorio de su médica pediátrica de cabecera, la Dra. Maidana, quien los atiende y realiza una evaluación del menor, constatando que tenía una apnea respiratoria y con criterio de urgencia nos deriva al hospital San José. En dicho nosocomio, los recibe el Dr. Ismael Barreto, médico de guardia al cual le informa verbalmente el cuadro que había relatado su pediatra, solicitándole el galeno que debía contar con una derivación escrita con el diagnóstico. Por tal motivo, se tuvo que dirigir nuevamente en su auto particular al consultorio y regresa con la receta de la médica con el posible diagnóstico apnea respiratoria”.

En el escrito de derivación, la pediatra le solicita al médico de guardia del nosocomio sanjosesino “que acompañe al bebé saliendo del hospital con una enfermera del efector con oxígeno”.

El bebé llega al hospital San Benjamín de Colón. Allí, el pediatra de guardia le hace una evaluación mínima sin saturarlo en nivel de oxígeno, “dándole el padre del menor el pedido de la médica pediatra y alegó no tener los medios suficientes para la atención por el cuadro en que ingresó al hospital, ‘lavándose las manos’ el doctor. Posteriormente, explicó que lo hacen retornar al hospital San José con la ambulancia del hospital y en conocimiento del Dr. Marcos Luciani, en tránsito a San José nos hace dirigir hacia el hospital Urquiza (de Concepción del Uruguay). Habiendo pasado, a todo esto, más de tres horas, llegan al hospital donde los recibió el Dr. Castañeda y confirma el diagnóstico de su pediatra, cuando su hijo entra en paro cardiorrespiratorio con pronóstico muy reservado peleando por su vida”.
Denuncia penal archivada y sumario abierto
La situación derivó en la presentación de una denuncia en la Justicia, que se caratuló: “Legajo N° 1061/2017 Iñiguez Christian Javier / Su denuncia”, la cual tramitó por ante la Unidad Fiscal Colón, a cargo de la fiscal María Noelia Batto.

La fiscal Batto no dio una mejor respuesta a los padres del bebé: el 28 de abril de 2023 archivó la denuncia. Pero Salud entendió que aún habiéndose archivado la causa judicial, procede la investigación administrativa sobre el rol que cumplieron los médicos.

Israel Antonio Barreto, el primer profesional que recibe al niño en el hospital San José, se acogió a la jubilación el 31 de mayo de 2023, por lo cual no procede ninguna sanción del Estado.

En tanto, el médico Juan Andrés Arin ocupa un cargo de profesional asistente en el hospital San Benjamín. A este último se le inició un sumario administrativo “por encontrase su conducta presuntamente incursa en la causal de cesantía”, según la disposición de Salud.
Fuente: Entre Ríos Ahora

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