Felipe Contempomi, entrenador del seleccionado argentino, habló de la importancia de Marcos Kremer en la cancha: “Si hablamos de consistencia, Marcos lo es”, dijo Felipe Contempomi a 3200, el código del deporte.
La previa del encuentro
Santa Fe volvió a recibir a Los Pumas tras aquella derrota 12-30 ante Gales en 2018. Mediodía soleado, de mangas cortas y andar rápido por avenida Juan José Paso, la que este sábado 7 de septiembre condujo al Fan Fest del estadio “Brigadier General Estanislao López”.Familias por acá y más allá empezaron a rodear la casa del Club Atlético Colón a medida que el mediodía se convirtió en siesta, esa que todavía suele dormirse en ciudades ubicadas alrededor de la capital santafesina que nutrió de clubes, escuelas y más familias que viajaron para el juego de la cuarta semana del Visa Macro Rugby Championship.
Dentro del estadio, la tribuna noreste fue la primera en cubrirse completamente (la que estuvo al sol de los 28 grados que registró Santa Fe para el inicio del match). Detrás de las haches estuvieron cientos niños y jóvenes vestidos con los colores de sus clubes de origen. El rugby abraza a todos por igual, una camiseta a rayas, lisa o las más osadas son bienvenidas por igual.
Por supuesto los hubo de celeste y blanco. Al futbolero, vale decirlo, el estadio de fútbol se convirtió en un templo de rugby con pocos “Messis” u otros integrantes de “La Scaloneta” y muchos bastones celestes y blanco en horizontal; más algunos “granaderos” y hasta banderas con el rostro de Marcos Kremer, por lejos el más ovacionado junto a Mateo Carreras.
Primera parte del partido
El partido comenzó a las 16:11, es decir, a menos de una semana de la ajustada derrota por 19-20 en La Plata, correspondiente a la tercera fecha del certamen que reúne a los 4 mejores seleccionados masculinos del hemisferio sur. Los Pumas y Australia volvieron a cruzarse y, antes de los 4 minutos de juego ya hubo conversión para el conjunto nacional (penal de Carreras).Donaldson convirtió el 3-3 antes de los 6 minutos. A los 14:05 se pusieron en ventaja, por primera vez en la tarde, los Wallabies (try del 7 y posterior conversión del 10, Donaldson). 3-10. A los 17 minutos llegó la primera gran explosión de la tarde: try del concordiense Marcos Kremer, en su partido número 71.
Suspenso. TMO, charlas entre el juez y sus dos asistentes y repaso final con los capitanes. Resultado: anulado. A los 21:57 Donaldson estiró a 13 la puntuación para los oceánicos, tras un penal ejecutado desde los 22 metros. Kellaway anotó un nuevo try antes de la media hora de juego, que además sumó el penal del infalible Conalson (3-20).
38 segundos después de la media hora, empezó el cambio con una patada hacia el centro, la captura de un puma. Mateo Carreras y Tomás Albornoz los responsables de esos 7 puntos (10-20). El “Vamos Pumas, Vamos” se volvió más insistente a partir de entonces. Otra conversión, cuando el juez ya había pitado, levantó al público. Julián Montoya, a los 37 sí anotó para alegría. El “Olé, olé, olé, Julián, Julián, Julián” se escuchó en los cuatro lados de la cancha. El Julián del rugby recibió su ovación.
Albornoz aportó su penal para dejar 17-20 a los dirigidos por Felipe Contepomi. A menos de un metro quedó Argentina de volver a convertir y, en definitiva, a sólo 3 puntos de igualar el juego se fue al entretiempo.
Segunda mitad
17:15, el horario exacto en que comenzó la segunda parte. Un scrum fue la primera acción. Santiago Carreras (tras el descanso), Eduardo Bello y Joaquín Oviedo (tras minuto y medio de empezado el segundo parcial) ingresaron desde el banco.Actualizando estadísticas: por el Rugby Championship, Argentina y Australia se enfrentaron en 23 ocasiones, con 5 triunfos para Los Pumas (rival al que más veces venció en dicho torneo), 2 empates y 16 derrotas. Otro dato es que Juan Martín González logró anotar un try en cada uno de sus últimos cinco partidos ante Australia, incluyendo uno el último fin de semana (a los 48 anotó nuevamente para recuperar aquella ventaja que al inicio había tenido Argentina (Albornoz anotó su penal 24-20).
A los 56:55 llegó otro “vaaaaaamos” del público con la anotación de Matera, el número 5. Albornoz, en su quinto partido como titular del año, hizo su conversión para sacar 11 de ventaja (31-20).
62:30 desde 25 metros convirtió su segundo penal de la tarde para 34-20 con el que Argentina estiró a 24 puntos seguidos sin permitir puntos de los australianos. A los 64, Oviedo que había ingresado poco antes sumó otro try (que también tuvo la conversión del Albornoz) para aumentar a 41-20.
Recién a los 69 minutos, volvió a sumar la visita (try del 27 y conversión posterior) para ponerse 41-27. No hubo chances de reacción. Antes de los 72 minutos y tras varios pases en un ataque que fue del centro hacia la derecha, Juan Cruz Mallía superó el line gol y anotó 46-27. Albornoz no pudo sumar los dos puntos extras, por primera vez en el juego.
Por si fuera poco, a los 74:45 el mismo Mallía hizo levantar a la hinchada que bailó al ritmo de “Los Palmares” y su ya clásico “Sabalé, Sabalé, que soy Sabalero”. 53-27 subió el tanteador post conversión del 10 celeste y blanco. Hubo más, con Joaquín Oviedo que aportó su segundo try un minuto después del anterior y con la cumbia santafesina a flor de piel.
Bailaron adentro, bailaron afuera en una tarde de primavera inolvidable. Carreras pateó la conversión para llegar a 60-27. El 13 anotó otro try que el juez refrendó a instancias de una revisión previa. 67-27 terminó con el penal final de Carreras.