La lesión grave involucró la destrucción de tejidos blandos del pie (piel, grasa y músculo) luego del impacto.
Una vez ingresado al centro médico, debió ser operado durante la noche del domingo por el traumatólogo de guardia para reparación de los tejidos lesionados y evaluar si había daño de nervios, músculos y tendones.
El conductor del vehículo fue quien llevó al niño al hospital para que reciba atención médica y lo acompañó hasta saber cómo evolucionó.