Mientras, la oposición se frota las manos. A río revuelto, ganancia de pescador o de acordeonista en este caso porque Francisco Azcue (el precandidato que más votos cosechó) ve en esa división del peronismo un motivo más para ser optimista de cara a las elecciones. Lo otro que expone estas dilaciones (las PASO fueron el domingo y hay una interna aún abierta) es que hay un sistema que no va más. Es “vetusto” como lo calificó el propio gobernador en 2018.
“El sistema de Boleta Única tiene como, una de sus tantas ventajas, la de agilizar la votación pero también, y no menos importante teniendo en cuenta lo que ocurrió el domingo pasado, el escrutinio de los votos”, confió a El Entre Ríos un profesional del derecho que ha estudiado y enseñado esta herramienta que emplean algunas provincias como la vecina Santa Fe.
La frase resume el espíritu de este breve comentario: ¿qué más debe suceder en la provincia para que se llegue al consenso necesario para que la Boleta Única se incorpore? ¿En tal sentido, no es acaso la Boleta Única de Papel el instrumento más adecuado para dar un paso adelante respecto al actual? ¿Cuántas más sábanas cubrirán bancos en las aulas destinadas al voto en los domingos electorales? ¿Cuánto más papel se imprimirá para que termine en un tacho tras quedar en desuso post elección en clara contradicción con el deseo de un mejor cuidado del ambiente?
¿Tantos más errores, dificultades o complejos conteos habrá que soportar para que se dé el paso? ¿Cuántas elecciones reñidas más habrá (como la de Concordia que siendo jueves aún no está esclarecida en la interna del peronismo)? ¿Qué otros proyectos se presentarán sin éxito en la Legislatura provincial? ¿Por qué no hubo avances en los últimos amagues que la propia gestión Bordet hizo antes de las elecciones de este año o allá por 2018?
En muchas democracias del mundo se utiliza la Boleta Única de Papel, un instrumento de votación que presenta las listas y/o candidaturas de los diferentes partidos en una única boleta. Sus diseños son muy variados, pero comparten un elemento común: su distribución y disponibilidad en los centros de votación es responsabilidad del Estado. Gracias a esto, garantiza una oferta electoral completa a través de los centros de votación. Por eso, si se lo compara con la boleta partidaria que aún se utiliza en Entre Ríos, un instrumento de votación oficial provisto por el Estado equipara las condiciones de competencias entre partidos y mejora el acceso al sufragio entre los votantes.
Bordet, lo “vetusto” y “el mejor sistema”
Cabe destacar que, al menos en sus declaraciones, el actual gobernador entrerriano ha expresado su mirada a favor de la Boleta Única de Papel: “Personalmente pienso que es el mejor sistema”, afirmó allá por noviembre de 2022.Y señaló que el tema deben abordarlo los dirigentes políticos, sin involucrar a la ciudadanía. “Creo que hay que dar un amplio debate, primero dentro de nuestro frente político", propuso. Sobre las distintas posturas en el justicialismo sobre el tema, admitió: “tenemos nuestras opiniones. Yo tengo las mías. Las he planteado muchas veces".
Y recordó el intento durante su primera gestión: "Presenté en 2018 un proyecto de ley de reforma electoral y propuse la boleta única de papel y sigo pensando que ese es el mejor método". Incluso añadió que "el voto electrónico es el mejor método para votar. En ese momento nadie estuvo de acuerdo con eso. Ni de la oposición, la misma que votó ahora boleta única de papel”, observó en alusión a la aprobación de ese sistema en la Cámara de Diputados de la Nación, que luego cayó en el Senado.
Una cita a aquella propuesta de reforma política que el mandatario remitió en abril de 2018 al Senado entrerriano: “es necesario dar respuesta a los reiterados cuestionamientos de la ciudadanía en torno a las falencias del actual sistema, tanto por su elevado costo y duración de las campañas, así como por el tratamiento que le damos a nuestros espacios públicos en épocas electorales, sin dejar de destacar el reclamo de falta o sustracción de boletas de las distintas fuerzas en los recintos electorales que es únicamente ejecutable a través de la boleta denominada sábana, entre otros reclamos”.
Incluso fue más lejos hace ya más de 5 años: agregó que la ciudadanía ha manifestado en los últimos tiempos su inconformidad con “lo arcaico y vetusto” de la legislación entrerriana que rige los comicios, la cual “presente inconsistencias que afectan a la autosuficiencia que debe caracterizar a un sistema de normas que rijan el instituto”.
Mucho de lo que afirmó en aquel entonces Bordet se repitió en los cuartos oscuros y, en el posterior recuento, este 13 de agosto donde el escenario fue aún más complejo por las múltiples propuestas que se pusieron a consideración del electorado. No fue promoción, sino un diagnóstico certero de una instancia que muchos distritos del país han superado gracias a la Boleta Única de Papel.
Mesas con largas demoras, cuartos oscuros pequeños para tantas boletas, repetidas interrupciones en el proceso para que autoridades de mesa y fiscales controlases, ordenases y repusiesen balotas; un conteo que llevó largas horas y telegramas que, en algunos casos, tienen imprecisiones, números que no coinciden, tachaduras o que incluso quedaron en blanco dan testimonio de lo “vetusto” que resulta.
Volvamos a 2022, es decir al último intento del gobernador entrerriano por dar esa reforma política. Lo suyo fue una declaración de buenas intenciones que no prosperó y que puede resumirse en una frase publicada en este mismo mes del año pasado en la web de “Página Política” que decía: “Desde la Casa Gris lanzaron el globo de ensayo. Levantó vuelo, corto, y terminó en nada. Al menos por ahora, aunque no hay mayor espacio temporal para intentarlo de vuelta”.
La referencia era a que estaba terminando el año legislativo y que, finalmente, no había proyecto presentado ni desde el Ejecutivo ni tampoco desde la bancada peronista. En tanto, la oposición tampoco había reactivado sus iniciativas al respecto. ¿Por qué unos y otros mantuvieron el esquema actual, aún cuando hasta en lo público el gobernador hablaba de cambio? ¿Qué hizo que la bancada oficialista no siguiera el camino que su jefe político les transmitió? ¿Por qué los que se jactan de ser el cambio no dieron ese paso de modificar el instrumento de votación en Entre Ríos?
Algunos intentos en la Legislatura
Hay que irse a abril de 2022 para encontrar una de las últimas iniciativas que ingresaron a la Cámara de Diputados. Fue presentada por la diputada provincial Lucía Varisco: “Creo que ahora que no hay elecciones esto se puede discutir, debe ser un debate amplio y profundo, donde se escuchen todas las voces. Es un salto de calidad. Permite mostrar de forma más clara la oferta electoral y que sea más simple para cada ciudadano", dijo.La paranaense no tuvo suerte hasta el momento aunque el proyecto no fue archivo. El contexto político para ella era difícil y es de presumir que le quitó posibilidad de sumar apoyo: venía de un 2021 donde se había presentado como candidata a diputada nacional, por fuera de Juntos por el Cambio. Aunque sólo hubo amagues con expulsarla del partido, finalmente recibió una sanción menor: no podrá competir por cargos dentro de la UCR.
No obstante, algunas de sus explicaciones valen rescatar: “Si son varios los cargos (gobernador, senadores, intendentes, concejales), cada cargo tendrá su lista con todos los candidatos, están todos en la misma boleta. Uno elige en cada papel a quién quiere votar. Debe marcar con una birome a quién elige".
Consideró que "clarifica la oferta electoral y les permite a todos los partidos competir en igualdad de condiciones. Se ahorra dinero y es fundamental por la cuestión ambiental. Se imprime mucho papel y en esta nueva propuesta no. Es muy importante avanzar, debe darse el debate. Quiero trabajar el proyecto en comisión, que cada diputado participe".
"Nosotros dentro del radicalismo elegimos con boleta única hace varias elecciones. Es un sistema que el partido avala, está de acuerdo. Se implementó en Santa Fe y también en Mendoza. Depende de cada partido adaptarse a los nuevos tiempos", dijo.
En la Cámara Baja ha habido varios intentos por incorporar la Boleta Única: por ejemplo, en 2010 ingreso el proyecto de Reforma Parcial de la Ley 2988 cuyos autores eran, entre otros, Ana Delia D’Angelo, Jorge Alberto Kerz, Juan Domingo Zacarias y el que fue tres veces gobernador, Jorge Pedro Busti.
En 2013, el intento llegó desde el oficialismo y a través de una mujer que hoy compite por la intendencia de Paraná: Rosario Romero, la actual ministra de Gobierno y Justicia de Entre Ríos. La entonces diputada había ingresado, el 18 de junio de hace 10 años, el proyecto de ley “Sistema de Boleta Única de Sufragio”.
En 2015, en tanto, el diputado provincial Enrique Fontanetto (actual pareja de Ana D’Angelo, que fue precandidata a vicegobernadora en la lista encabezada hasta este domingo por Pedro Galimberti) también quiso dar el paso con su proyecto de ley “Boleta Única Electrónica”.
Hay un antecedente más, en este caso desde el Senado Juvenil. 10 años pasaron de la iniciativa de los estudiantes del Colegio Secundario Saint Exupery de Concordia, lo que muestra que la inquietud por esta herramienta para votar es de vieja data entre los jóvenes. Entonces, el proyecto presentado por Natalia Tomaselli y Facundo Ibarburen fue aprobado en la instancia provincial.
“No encontramos desventajas en la boleta única”, afirmó entonces uno de los estudiantes y sobre las ventajas destacó:
• Facilita el voto porque habrá más voces permitiéndose el voto cruzado;
• No genera el efecto arrastre que es lo que ocurre con las boletas tradicionales que, por ejemplo, al simpatizar con el gobernador meto la lista entera sin saber a quién voto;
• Permite un ahorro al costo electoral y a la disminución del uso del papel (se imprima la cantidad necesaria y justa según el padrón electoral más un 5% para el caso que se rompan, por ejemplo);
• Contribuye a que sea un voto pensado porque la gente debe ir y, en el momento, le dan la boleta;
• Y no se pueden usar boletas apócrifas que por ahí son las que se reparten y son nulas.
Lo que le llegó a Frigerio
Era verano, hacía calor como en buena parte de este 2023 en Entre Ríos. Entonces, los socialistas de Paraná concurrieron a un acto de “Juntos por el Cambio” y le acercaron a Rogelio Frigerio, hoy candidato a gobernador, un proyecto de reforma política para Entre Ríos.En esa batería de sugerencias, que Frigerio de inmediato pasó a Adrián Pérez, que fuese Secretario de Asuntos Políticos e Institucionales cuando estuvo al frente del Ministerio del Interior, incluye el pedido de incorporar la Boleta Única Papel en Entre Ríos.
“Resulta increíble que después de casi 20 años consecutivos de gobiernos justicialistas no hayan modificado el conservador sistema electoral entrerriano”, subrayaron los socialistas en el escrito presentado a Frigerio.
Protagonistas del peronismo, radicalismo, de “Juntos” o el socialismo han coincidido en algunas presentaciones y en varias ocasiones al hablar del tema. Sin embargo, nada han concretado para cambiar este aspecto del a realidad electoral que sigue basándose en un sistema anacrónico. Modificarlo es imperioso. De aquí a las Legislativas de 2025 hay tiempo para que finalmente suceda.
