Desde el municipio acusan a estos jóvenes de alterar la documentación presentada antes de emprender el viaje estudiantil, sabiendo que eran positivos en coronavirus. Los seis viajaron en un grupo de 60 y aseguran que "habrían manipulado la documentación que presentaron a la empresa para ocultar que eran positivos de Covid-19".
Esto generó que las autoridades municipales decidieran formular una denuncia penal para que la Justicia investigue el caso y determine si se ha cometido un delito.
"Nos vamos a presentar ante la Justicia para que investigue", aseguró el secretario de Turismo de la ciudad andina, Gastón Burlón, quien caracterizó el proceder de los jóvenes como "una irresponsabilidad y una falta de empatía".
"Con esta irresponsabilidad, con esta falta de empatía, y con gente que presenta documentos que no son reales, es imposible", dijo el funcionario.
Cómo habrían “falsificado” documentos
La información con la que cuentan los denunciantes es que estos seis jóvenes se habían realizado un test PCR antes de viajar y que les había dado positivo en Covid-19.Para no tener que suspender el viaje al día siguiente se hicieron un test rápido que les dio negativo y presentaron esa documentación a la empresa contratada.
"Lo que hicieron estos chicos fue meter al lobo en el gallinero: venir contagiados a un viaje donde sabés que vas a estar en modo burbuja compartiendo las 24 horas con las mismas personas", sostuvo Burlón.
"Tenemos que asumir por supuesto que muchos de los demás chicos también se habrán contagiado, ya que estuvieron en modo burbuja una semana compartiendo todo", expresó.
El secretario de Turismo remarcó que "fue una falta contra la empresa, contra sus propios compañeros, contra nosotros como destino, porque sabiendo que eran positivos viajaron igual".
También dijo que no pueden brindar más datos sobre el caso "porque esto va a pasar a manos de la Justicia a través de la denuncia penal que vamos a presentar".
Burlón recordó que ya habían tenido experiencias exitosas y seguras de turismo estudiantil con otro grupo de entre 80 y 90 chicos que viajaron desde otra ciudad sin ningún problema.
"Los protocolos funcionan bien, pero contra la irresponsabilidad de esta gente no se puede hacer más. A esto nos referimos cuando hablamos de responsabilidad social y de que depende de cada uno de nosotros que la actividad turística pueda seguir adelante", concluyó el funcionario.
