El no inicio del segundo cuatrimestre fue resuelto en el Congreso extraordinario de la Federación Nacional de Docentes Universitarios (Conadu) del 6 de julio, dentro de un plan de lucha que además incluye la realización de un Plenario de secretarios generales el 10 de agosto, a fin de evaluar la medida de fuerza, y una Movilización Universitaria conjunta, con fecha a definir.
La medida fue apoyada por el 75% de la docencia universitaria entrerriana, que se expresó a través de un plebiscito convocado por Conadu e instrumentado por AGDU en las distintas facultades de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER). Similar porcentaje se cosechó a nivel nacional.
En UNER no habrá actividades académicas entre el 6 y el 10 de agosto, en principio. Luego se evaluará cómo continúa la lucha.
Paralización
El rector de la UNER, Andrés Sabella, expresó días atrás su preocupación por el ajuste a las universidades nacionales y advirtió que en lo que va del año ya se lleva ejecutado el 75% del presupuesto asignado a la Universidad entrerriana. En ese marco advirtió que “si el Gobierno no da respuestas a los planteos que se han expresado en el CIN (Consejo Interuniversitario Nacional), llegado septiembre hay un serio riesgo de no tener presupuesto para abrir las casas de estudio”.La comisión directiva de AGDU revalidó la inquietud de Sabella. “Todo lo que venimos advirtiendo respecto el ajuste y el recorte presupuestario, y a la problemática que se acerca para las universidades nacionales en general y para la UNER en particular, ahora ya es palabra del Rector”, resaltaron al respecto desde el gremio.
También informaron que el Presupuesto total a las universidades nacionales para este 2018, previsto en $107,6 mil millones, ya sufrió un recorte de $1.056,4 millones, de acuerdo a un nuevo informe del Instituto de Capacitación y Estudios (IEC) de Conadu.
De este total, $655,9 millones fueron quitados del presupuesto de la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU) y los $400 millones restantes a otros programas y jurisdicciones. El recorte del presupuesto de la SPU afecta especialmente a las áreas de Proyectos Especiales (-90,9%); Infraestructura (-40,3%); Conducción, gestión y apoyo a las políticas de educación superior (-31,2%) y Fomento a la actividad de investigación de los docentes universitarios (-3,7%). Además, el nivel de ejecución al 30 de junio de 2018, fue más bajo que el alcanzado en los últimos tres años, producto de la reducción del crédito y la subejecución presupuestaria.
“Frente al ajuste, la inflación, la falta de paritaria, la negativa del Gobierno nacional de ajustar los salarios de acuerdo a la inflación y el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, ratificamos la lucha por la universidad pública”, expresaron desde AGDU.
“En los próximos días recorreremos las distintas sedes de nuestra Universidad para poder tener un diálogo fluido con cada uno de los docentes, de manera de poder ir recepcionando alternativas a una lucha, que creemos va a ser larga y difícil”, aseguraron.
“Defendemos nuestro derecho a cobrar los salarios en tiempo y forma. Y también defendemos el derecho a acceder a la universidad, que debe ser pública, gratuita, laica y de calidad, y debe ser garantizada por el Estado”, subrayaron. “Por eso convocamos a los docentes y la sociedad en general a defender este ejemplo de educación que tenemos en Argentina”, finalizaron.