Al menos por ahora, se trata de la única planta en el mundo que debió dejar de producir, de las 18 que la firma austríaca tiene instaladas en 8 países diferentes.
Parar de golpe una fábrica de las dimensiones de EGGER Concordia no es tarea sencilla. “En las líneas de tablero, que son las más difíciles de detener, llevó mucho tiempo el proceso para paralizarlas. Nos llevó casi un día el enfriamiento”, explicó a El Entre Ríos uno de los directivos de la planta.
Este viernes por la tarde, la firma analizaba los detalles de la “ampliación de las excepciones” que modificó el decreto original de la cuarentena general. “Por ahora, tenemos todo detenido, mientras evaluamos si hay alguna excepción que nos permita funcionar o no”, explicó.
Con independencia del freno absoluto en las líneas de producción, la parálisis también se extiende a la logística de transporte y comercialización.
“En el resto del mundo, las fábricas de EGGER hoy están funcionando, pero esto es muy dinámico y hay que ver qué pasa la semana que viene”, agregó.
La planta del parque industrial de Concordia no es la única en la provincia que paralizó su actividad. Varias firmas asociadas a la Unión Industrial de Entre Ríos también dejaron de producir este viernes, mientras evalúan si alguna de las excepciones a la cuarentena les permite reanudar o si deberán aguardar hasta el 31 de Marzo.
Y, aunque no lo expresen públicamente, los industriales están preocupados por las graves consecuencias económicas, aún no del todo cuantificadas, que esta situación extraordinaria provocará.