La última reunión del Consejo Federal de Educación, el 10 de febrero, dejó definidos los protocolos para que las clases sean presenciales, en torno a los pilares: asistencia cuidada, vacunación, uso de barbijo, ventilación, higiene y limpieza y distancia. Ante esto, Padres Organizados expresaron que “el Protocolo para el regreso a clases con el grandilocuente título de "Aulas Seguras" un eufemismo que pretende que olvidemos que las aulas siempre fueron seguras, y las escuelas no debieron cerrarse en una virtualidad excluyente ni abrirse con una presencialidad restrictiva."
En ese sentido, plantearon que "los protocolos ‘aulas seguras’ no se sustentan en ninguna evidencia científica, son discriminatorios, no toman en cuenta las necesidades de la infancia y adolescencia (...) Los somete, una vez más, a protocolos restrictivos que los adultos vamos dejando atrás”.CARTA ABIERTA AL GOBERNADOR @bordet
— Padres Organizados Entre Ríos (@PadresRios) February 15, 2022
"Conservábamos esperanza que, después de dos años de pandemia y de una gestión, su gestión, que dejó a niños, niñas y adolescentes a su suerte, finalmente entendiera que no podemos seguir dejando de lado a nuestros gurises".
Esta no es la primera vez en lo que va del año que la agrupación se dirige a las autoridades provinciales. El 8 de febrero hicieron un comunicado similar, haciendo la comparación con la quita de barbijos en colegios de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
“No somos anti vacunas”
La agrupación que se define como “un grupo de papás que trabajamos para el retorno de las clases presenciales”, aseguraron que no están en contra de las vacunas: “Creemos firmemente en ellas, y también en el bien superior del niño. Hoy, no existe consenso internacional sobre el beneficio de la vacunación infantil. Somos, ante todo, pro derechos del niño a una vida sana, feliz y libre de discriminación”.También refirieron al uso de barbijos: “Creemos que las políticas públicas deben basarse en evidencia. No somos anti barbijos. Con la evidencia disponible hoy somos pro sonrisas, pro aprendizaje, pro infancia. No hay remedio contra la infancia perdida. Es momento de que los adultos permitamos que los niños sean niños”.