A raíz de la bajante histórica del río Paraná, que provoca una emergencia hídrica, desde el gobierno provincial habían solicitado habilitación a la Justicia Federal para la implementación de esta técnica, destinada a prevenir y auspiciar los trabajos de potenciales combates de incendios forestales.
El cortafuego constituye una “intervención amistosa” con el ambiente hasta suelo natural, en el que se le suprime o se traza una línea a través de la cual se le quita el material combustible para poder administrar algún evento ígneo, que facilita no solo el corte de por sí del fuego, sino un eventual o potencial abordaje de los brigadistas para el combate, dieron a conocer.
Previo a la realización del cortafuego, los interesados en ponerlo en práctica deberán solicitarlo vía correo electrónico a [email protected] con copia a [email protected].
En dicha solicitud deberá presentar el circuito -preferentemente a través de un gráfico- donde pretende realizar el cortafuego: la Secretaría de Ambiente lo hará supervisar por su área técnica y, en el caso que lo considere “auspicioso” y “ambientalmente amigable”, emitirá una resolución autorizándolo, fijando fecha de ejecución, en el cual asistirán brigadistas de la Brigada de Respuesta Ambiental a supervisarlo.
En el caso de incumplimiento o extensión del plano presentado y autorizado, se correrá vista al Juzgado Federal interviniente para que proceda como corresponda.
