“Reafirmamos nuestra convicción respecto a que la vida humana comienza desde la concepción y de ahí una persona con plenos derechos, a quienes reconocemos su dignidad como un ser único e irrepetible, por ende de un valor único”, manifestaron.
En esta fecha, consideraron oportuno “pedir perdón al autor de la vida, Dios, por lo que se hace en nuestro país” y al mismo tiempo “honrar la memoria de cientos de seres humanos que son muertos en el vientre materno, de la mano de una ley que así lo permite”.
“Es un genocidio silencioso, al que no podemos ignorar ni olvidar”, sostiene el documento, firmado por Daniel Ozuna, presidente de APUC.
“Hoy volvemos a ser la voz de quienes no pueden hablar: no aceptamos ni aceptaremos jamás la práctica nefasta de ponerle fin a la vida de un ser humano que es privado de su derecho de vivir”, reiteraron.
“Las víctimas inocentes e indefensas que mueren mediante esta práctica atroz, descansan en los brazos de su creador, pero oramos por las personas que de una o de otra manera son afectadas y padecen de este momento difícil, también oramos por la conciencia silenciosamente doliente de quienes deben realizar el cumplimiento de la actual ley de interrupción de la vida”, afirmaron luego.
Planteando que el aborto puede ser “legal pero jamás moral”, invitaron a la sociedad en su conjunto “a un momento de reflexión profunda sobre este tema, para revalorizar la vida desde su inicio y su correspondiente desarrollo humano, a partir del sentido común y del sentimiento de superación del ser que cada uno posee”.
