Tácito, gran historiador romano, cuenta que durante los comicios para elegir senadores, los candidatos vestían togas blancas mientras duraba el comicio. Candidato viene de “candidus” que significa blanco, y de allí también el nombre de un hongo que nos afecta y es muy común: candida albicans. Las mucosas afectadas aparecen recubiertas de manchas blancas. Estos hongos proliferan cuando hay fallas en las defensas del organismo; tal como acaso los candidatos aumentan cuando la Nación está indefensa. Y aumentan su dieta en un 40%. Pero de alguna manera son sinceros: no vistieron de blanco. Lo escuché en una vieja película francesa, de la que no recuerdo el título: “Lo difícil del ser infeliz, es ser discreto”.
Rodolfo Walsh (1927-1977) escribió a su hija asesinada durante la represión: “Nosotros morimos perseguidos, en la oscuridad. El verdadero cementerio es la memoria. Así te guardo, así te acuno, así te celebro y quizá te envidio, querida mía”. TS Eliot nos advirtió: “El mundo está haciendo un experimento en pretender formar una mentalidad culta, pero no cristiana. El experimento fracasará, pero debemos ser muy pacientes en esperar su fracaso, redimiendo entretanto el tiempo para que la Fe pueda preservarse viva a través de las oscuras edades que nos aguardan, para renovar y reconstruir la cultura y salvar al mundo del suicidio”. De todas las palabras más tristes de la lengua y de la pluma, elijo estas: “Podría haber sido”. John Whittier (1807-1892).
De Fernán Silva Valdez:
Qué lindo
vengan a ver qué lindo:
en medio de la calle ha caído
una estrella;
y un hombre enmascarado
para ver qué tiene adentro se
está quemando con ella.
Vengan a ver qué lindo,
en medio de la calle ha caído
una estrella,
y la gente asombrada,
le ha formado una rueda
para verla morir entre deslumbrantes
boqueadas celestes.
Estoy frente a un prodigio
-a ver quién me lo niega-
en medio de la calle
ha caído una estrella.
De Adolfo Bioy Casares: “Suena el despertador y siento el júbilo de estar vivo, de empezar un día nuevo. Es un júbilo minúsculo y nítido, como la moneda de cinco centavos de los buenos tiempos”.
“Shtisel” es una hermosa serie que nos presenta Netflix. La vida de dos familias judías ultraortodoxas en un barrio de Jerusalén. La recomiendo.