La causa judicial fue iniciada en la Fiscalía de Violencia de Género a cargo de Pablo Zoff, quien recibió el martes una denuncia de una mujer de 28 años que aseguró que durante un año estuvo privada de la libertad, encadenada por su pareja, el padre de sus tres hijos pequeños. Los incidentes ocurrieron en una casa de Sauce Montrull, cerca de Paraná. Y según el relato de la víctima, ella sufrió graves situaciones de abusos, sometimientos y dijo haber sido dopada con psicotrópicos y encadenada a la cama matrimonial por espacio de varias horas.
La denunciante declaró que los celos enfermizos de la pareja llevaron a que todas estas situaciones de violencia se produjeran de modo regular, las cuales habrían sido naturalizadas por los pequeños hijos.
En la acusación remarcó que los actos de crueldad eran constantes, que sufrió violencia física y psíquica.
Contó que el hombre, tras dejarla encadenada a la cama, dopada y amenazada, la vigilaba con un sistema de dos cámaras de seguridad que estaban en la habitación para filmar todos sus movimientos.
En esa línea, el hombre al regresar a la casa observaba las imágenes y verificaba que los señuelos puestos en las ventanas estuvieran en el mismo lugar para, de esa manera, establecer que no hubo ningún intento de fuga.
La mujer denunció que las aberturas estaban atadas con cadenas. Y por otra parte, en los allanamientos posteriores, los efectivos encontraron en las ventanas pegamento y papeles colocados para demostrar la posible apertura.
La situación del detenido
El fiscal Pablo Zoff dijo que concluida la detención solicitada al juez Elvio Garzón, reclamará en las próximas horas el dictado de la prisión preventiva en el penal, por la gravedad de los delitos que se investigan.La audiencia imputativa se realizará este fin de semana, y luego se avanzará con las medidas restrictivas para lo cual, desde la fiscalía se reclamará al juez Elvio Garzón el dictado de la prisión preventiva en la unidad penal por un término que podría llegar incluso hasta los 90 días.
Zoff explicó sobre la causa: "La víctima estaba realmente muy mal y en su relato nos brindó una importante información, que luego fue corroborada en un allanamiento en la casa donde vivían".
El fiscal marcó que en la entrevista videograbada "hubo un relato terrible. Estuvimos mucho tiempo porque abordar una situación de esta magnitud es complicado para una víctima que ha quedado en una situación de extrema vulnerabilidad y desprotección. De allí la intervención de distintos organismo del Estado".
El escape
Trascendió que la mujer logró escaparse de las cadenas y candados en un momento que el hombre no se encontraba en la casa, y que tras tomar a los tres hijos salió desesperada a la ruta a pedir ayuda. Fue así que el conductor de un auto la trasladó hasta Paraná y le sugirió realizar la denuncia de forma inmediata.La denunciante quedó contenida por la Dirección de Asistencia a la Víctima y los tres pequeños hijos quedaron al resguardo de los abuelos maternos.
¿Cómo detuvieron al acusado?
El proceso de detención tuvo varios contratiempos, ya que el acusado no podía ser localizado en los lugares que solía frecuentar. Ante esto, una integrante de la división Trata de Personas obtuvo el número del teléfono celular para notificarlo de la resolución de la justicia. Sin embargo, nunca atendió los llamados.Ante esta situación buscaron un celular particular, y le enviaron un mensaje notificando que una señorita quería conocerlo. La respuesta fue inmediata y tras acordar la hora, se presentó en la esquina de Churruarín y Ayacucho, donde funciona la Dirección de Investigaciones. Allí un tanto sorprendido, el acusado fue advertido que iba a quedar detenido. Una vez concluido el trámite de identificación, se dispuso su traslado inmediato a la Alcaidía de Tribunales.