“Reemplazamos una gestión de dos décadas con un norte equivocado para la provincia, así que a medida que logramos ponerla de pie, estamos ordenando el desorden que encontramos. Mientras tanto, tratamos de dar respuestas en la medida que se pueda”, afirmó, a modo de balance sobre sus primeros 100 días en el cargo.
Tras reflejar la “difícil situación financiera” del Estado provincial, aseguró que “le estamos dando pelea, a este y a todos los problemas que enfrentamos, con el cuidado de cada centavo que entra y la eliminación de todas las cuestiones que estén vinculadas a privilegios de los funcionarios”.
“La situación actual es solamente comparable a la de 2001, con una caída de la recaudación fiscal del gobierno provincial y seguramente también de los municipios, como no se había visto nunca antes. Así y todo tenemos que gobernar, dar soluciones y ser más eficientes y eficaces que nunca”, contrastó.
No obstante, se mostró “convencido” de que hay una salida: “Estoy seguro que el gobierno nacional va a tener éxito en la lucha contra la inflación y que en algunos meses vamos a poder tocar piso y empezar a crecer”.
“Eso se sentirá en nuestra economía y, para cuando llegue ese momento, tenemos que estar preparados para darle soluciones a la gente. Hoy tenemos que empezar a trabajar, independientemente de que tengamos o no los recursos”, completó.