Las encefalitis equinas constituyen un grupo de enfermedades virales transmitidas al ser humano por artrópodos. Las de mayor importancia por su distribución e impacto en salud pública en nuestra región las Américas son la encefalitis equina del este (EEE), la encefalitis equina del oeste (EEO) y la encefalitis equina venezolana (EEV) y la Fiebre del Nilo Occidental.
Agente etiológico (causal): pertenecen al género de los Alphavirus, familia Togaviridae.
La enfermedad es transmitida por picadura de mosquitos infectados. Los huéspedes terminales que desarrollan una viremia suficiente como para infectar a los mosquitos, incluyen algunas especies de aves.
Los humanos no transmiten estos virus (EEO y EEE) a los mosquitos. No se ha comprobado la transmisión de persona a persona.
Dado que los équidos son los principales amplificadores del EEV epizoótico, estos brotes se controlan mediante la limitación de movimiento sobre los équidos, medidas de control de los mosquitos en el ambiente y la vacunación de los équidos.
El período de incubación de la EEO varía de 2 a 10 días.
Manifestaciones clínicas
Las enfermedades causadas por el virus de la Encefalitis Equina del Oeste van desde cuadros leves (cefalea, fiebre) hasta meningitis aséptica y encefalitis. Presenta un comienzo súbito con dolor de cabeza seguido de decaimiento, escalofrío, fiebre, mialgias y malestar general. Las manifestaciones neurológicas aparecen al cabo de varios días y pueden incluir letargo, somnolencia, rigidez de nuca, fotofobia, y vértigo, y en casos graves, estupor y coma”.Los síntomas neurológicos más frecuentes son debilidad y temblores generalizados. La mejoría suele comenzar varios días después de la defervescencia, entre 1 semana a 10 días.
La tasa de letalidad es del 3 al 4%, pero los adultos generalmente se recuperan completamente. Los niños tienen mayor riesgo de padecer infecciones del sistema nervioso central. Los casos leves de la enfermedad presentan fiebre, dolor de cabeza y fatiga que persiste por varios días o semanas.
En Argentina se realiza como diagnóstico diferencial en cuadros de encefalitis estudiados para otros arbovirus y no se han detectado casos hasta el momento.
Prevención y control
Dada la ecología de los potenciales vectores, se dificultan las medidas de control directas sobre las formas inmaduras (huevos, larvas y pupas), indican desde el nosocomio colonense.Se recomienda tomar medidas de saneamiento ambiental para evitar cuerpos de agua temporales en los alrededores del establecimiento donde se alojan los caballos o en espacios verdes de centros urbanos, donde particularmente Aedes (Ochlerotatus) albifasciatus suele ser abundante.
El desmalezado para disminuir la abundancia de mosquitos adultos.
En relación al uso de insecticidas, es importante señalar que la fumigación solo permite eliminar a los mosquitos adultos y lo más importante, no afecta a los estadios inmaduros. No presenta acción residual por lo que poco tiempo después de su utilización de esas formas inmaduras emergen mosquitos adultos que no se verán afectados.
La fumigación con insecticidas adulticidas solo es posible como una medida de control en los alrededores del establecimiento donde se alojen los equinos enfermos o en espacios verdes de centros urbanos donde se detecte una abundancia elevada de mosquitos.
La fumigación no es una acción de prevención en ningún caso. La principal medida de prevención para seres humanos es evitar la picadura de mosquitos que pudieran estar infectados con el virus.
Saneamiento ambiental:
- Saneamiento ambiental y drenaje para evitar la acumulación de agua en el suelo.
- Desmalezado de los predios y mantenimiento del pasto.
- Eliminación o protección de recipientes y otros objetos que puedan acumular agua dentro de los establecimientos de cría, viviendas y en sus alrededores. En particular, los bebederos de caballos.
Prevención de picaduras por mosquitos:
? Colocación de telas mosquiteras en puertas y ventanas de recintos de animales y viviendas.
? Uso de ropa de trabajo clara y de manga larga.
? Utilización de espirales en el exterior y pastillas o aerosoles en el interior de las edificaciones.
? Aplicación periódica de repelentes de insectos con el ingrediente activo DEET mientras se realizan tareas en el exterior o dentro de establecimientos de animales. Es necesario volver a aplicar el producto periódicamente. La cantidad de horas entre las aplicaciones dependerá de la concentración de DEET del producto empleado (un producto con 30% de DEET debe ser aplicado cada 6 horas mientras que uno que contiene 10% de DEET debe ser renovado cada 2-3 horas). También pueden utilizarse repelentes que contengan IR3535 o icaridina.
? El uso de repelentes con citronella como principio activo tienen un efecto menor que los que contienen DEET. Otros herbales como tinturas de clavo de olor, palo amargo, entre otras, o repelentes ultrasónicos no son efectivos contra la picadura de mosquitos.
“Al día 2 de diciembre de 2023 no se tiene información de casos sospechosos en humanos, se intensifica la vigilancia y se mantienen los equipos de salud en alerta”, finaliza el comunicado del Nodo Epidemiológico.